Padres indocumentados realizaron huelga de hambre para pedir ser liberados
Una organización de defensa de los inmigrantes y refugiados confirmó hoy que decenas de padres indocumentados retenidos en el centro de detención de Karnes, en San Antonio (Texas, EE.UU.), realizaron una huelga de hambre para pedir que los pongan en libertad junto a sus familias.
Desde el Centro para la Educación y Servicios Legales de Refugiados e Inmigrantes (Raices, en inglés), con sede en San Antonio, señalaron a Efe que disponen de cartas y grabaciones de llamadas telefónicas que confirman que los progenitores efectuaron el jueves una huelga de hambre.
Según Jorge Estévez, portavoz de esta organización, unos 80 padres con sus hijos se ubicaron en el campo de fútbol dentro del recinto y se rehusaron a recibir alimentos.
"Los menores, que reciben clases de educación, tampoco asistieron ni desayunaron", dijo Estévez, quien agregó que los agentes del centro de detención se acercaron para pedir a los detenidos a que no continúen la huelga de hambre.
La oficina en Texas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) rechazó que se hubiera realizado una huelga de hambre y que se trató mas bien de una reunión de "al menos 50 personas en uno de los espacios del centro de detención que buscaban respuestas a sus dudas sobre el proceso que se le sigue".
"El Servicio de Inmigración y Aduanas no es en realidad una agencia que promueva la transparencia", opinó Estevez en declaraciones a Efe.
El portavoz concuerda que efectivamente los agentes se acercaron a los detenidos para ver qué estaba pasando y quizás lo hicieron "para ponerles un alto".
En una de las cartas difundidas por Raices, un padre de familia detenido en Karnes y que ha sido recientemente reunificado con sus hijos, solicita a un juez de inmigración que los ayude "a ser liberados".
De acuerdo con Estévez, hay un malestar generalizado y acrecentado con la detención de los inmigrantes que fueron separados de sus hijos y vueltos a juntar después de varios meses.
"La situación es delicada para los más de 450 padres detenidos, muchos de ellos con hijos. Lo único que podemos hacer es charlar con ellos y tener cautela porque no sabemos si existe algún tipo de represalia en su contra", señaló.