Florida: 571 muertes por COVID-19, 21.628 casos y morgues móviles en Miami
Los casos del coronavirus SARS-CoV-2 siguen creciendo en Florida y alcanzaron la noche de este martes los 21.628, mientras el estado contabilizó 571 muertes por la enfermedad al sumar 72 en las últimas 24 horas, lo que ha puesto en alerta máxima a las autoridades y mostrado por primera vez en Miami la imagen de morgues móviles.
Al igual que sucedió en Nueva York tras el aumento súbito de fallecimientos, este martes aparecieron dos morgues refrigeradas en la Oficina del Forense del condado Miami-Dade, el epicentro de la enfermedad, con 7.712 casos y 143 muertes por la pandemia.
La imagen de las morgues móviles la mostró el canal Local 10 este martes, el mismo día en que el gobernador del estado, Ron DeSantis, reconoció en rueda de prensa que en el sur del estado se concentra la peor situación.
"Si se observa el total de casos y lo que está sucediendo en todo el estado, seguimos viendo la mayor parte de los casos en los tres condados del sureste de Florida (Miami-Dade, Broward y Palm Beach)", comentó.
Estos condados, "representan alrededor del 60 % del total de casos y más del 60 % de las hospitalizaciones", dijo DeSantis al tiempo en que intentó dar ánimo.
El gobernador, reacio a cerrar a cal y canto el estado, indicó que más de un millón de mascarillas, guantes y batas profesionales "ya están listas para distribuirse" por los hospitales.
Broward contabilizó esta noche 3.261 casos confirmados y 81 muertes, y el condado que le sigue, Palm Beach, 1.740 casos con el segundo mayor número de fallecidos: 103.
De acuerdo con el reporte del Departamento de Salud de Florida, hay 3.050 personas hospitalizadas como consecuencia del nuevo coronavirus, mientras las autoridades continúan rebajando los requisitos para tests de la ciudadanía.
En muchos de estos centros, a los que se accede en automóvil, ya no es indispensable tener cita previa ni más de 65 años, aunque sí tener síntomas de la enfermedad.
Este martes, tres ciudades del condado Miami-Dade (Hialeah, Hialeah Gardens y Miami Lakes) anunciaron coalición, con un toque de queda a partir de las 22.00 hora local, una hora antes de la ordenanza que ya existía.
Los viandantes sin justificación creíble podrían ser multados.
La medida llega un día después de que Scott Rivkees, el cirujano general del estado (equivalente a secretario de Salud), advirtiera de que los floridanos deberán continuar practicando el distanciamiento social durante al menos un año, hasta que se cree una vacuna contra el SARS-CoV-2, causante de la enfermedad del COVID-19.
Por su parte, la Asociación de Educación de Florida (FEA, siglas en inglés) pidió hoy a DeSantis mantener cerradas las escuelas por lo que resta de curso lectivo.
"El daño potencial que se podría causar a las familias y comunidades enteras por un brote del COVID-19 en incluso una escuela supera con creces los inconvenientes de continuar la educación a distancia durante el resto del año escolar", afirmó Fedrick Ingram, presidente de la FEA, en una carta a la que tuvo acceso Efe.
A la par que encogen o desaparecen los ingresos de miles de familias en cuarentena, se alargan las filas en los repartos gratuitos de comida, como la que formaron este martes en Opa-Locka (Miami-Dade) unos 500 automóviles.
La larga fila en el bulevar Sharazad parecía darle la razón al alcalde de Miami-Dade, Carlos Giménez, quien defiende que es necesario poner en marcha de nuevo la actividad económica y anunció este lunes dos iniciativas para hacerlo lo antes posible, pues ya se ve "la luz al final del túnel".
ORLANDO, EL SEGUNDO FOCO DEL COVID-19
Sin embargo, las últimas cifras sobre el impacto de la enfermedad del COVID-19 en el "estado del sol" dicen lo contrario.
En la zona de Orlando, en el centro del estado, está el segundo foco más importante de la enfermedad. Con 1.038 casos y 18 muertes, el condado de Orange es el que sigue a Palm Beach en la lista.
También es uno de los más tocados por el desempleo.
Los parques temáticos y los hoteles y centros de ocio a su alrededor, que dan empleo a decenas de miles de personas, están cerrados desde mediados de marzo y los grandes grupos del sector, como Disney World, han empezado a suspender sin sueldo a sus trabajadores ante la falta de una fecha cierta para su reapertura.