Estados Unidos le entra a la guerra contra el narco en Colombia
Una unidad especializada del Ejército de Estados Unidos llegará a Colombia en los próximos días para asesorar y ayudar en operaciones de lucha contra el narcotráfico a las Fuerzas Militares del país sudamericano durante cuatro meses, informó el miércoles la embajada estadounidense.
La brigada llegará a principios de junio, dijo la embajada sin especificar el número de efectivos militares que la conforman.
Es la primera vez que esta brigada trabajará con un país en América Latina, un hecho que reafirma el compromiso de Estados Unidos con Colombia, su mejor aliado y amigo en la región, de acuerdo con el Gobierno de Washington.
"La misión de SFAB en Colombia es una oportunidad de mostrar nuestro compromiso mutuo contra el narcotráfico y el apoyo a la paz regional, el respeto de la soberanía y a la promesa duradera de defender los ideales y valores compartidos", dijo en un comunicado el almirante Craig Faller, comandante en jefe del Comando Sur de los Estados Unidos.
Colombia cerró el año pasado con 212.000 hectáreas de hoja de coca, la materia prima de la cocaína, un ligero aumento desde las 208.000 hectáreas en el año previo, mientras que su capacidad para producir la droga aumentó a 951 toneladas métricas desde 879 toneladas en 2018, según la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca.
Colombia enfrenta una permanente presión de Estados Unidos, principal destino de sus envíos de cocaína, para reducir el área cultivada. El presidente Iván Duque estableció una meta para erradicar en 2020 130.000 hectáreas de hoja de coca, desde las 100.000 el año pasado, incluyendo la posibilidad de restablecer las fumigaciones aéreas.
El país suspendió en 2015 la fumigación aérea con glifosato acogiendo una recomendación de la Organización Mundial de Salud, que considera el herbicida como potencialmente cancerígeno y nocivo para la salud y el medio ambiente.
El Gobierno de Duque busca cumplir varios requisitos ambientales y de salud exigidos por la Corte Constitucional para reanudar este año la aspersión. Bogotá y Washington trabajan en un plan para reducir los cultivos de hoja de coca y la capacidad de producción de cocaína en un 50% a finales de 2023.
Colombia, con una posición estratégica por estar rodeada por dos océanos, es considerado uno de los mayores productores mundiales de cocaína, actividad en la que están implicados grupos de narcotraficantes, bandas criminales conformadas por exparamilitares de ultraderecha, la guerrilla del ELN, además de disidencias de las FARC.
Todos los miembros de la brigada cumplirán con los protocolos de bioseguridad exigidos por el Gobierno de Colombia para prevenir el contagio del COVID-19.
El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Luis Fernando Navarro, dijo que la asesoría de la unidad del Ejército de Estados Unidos la recibirán fuerzas de tarea dedicadas a combatir el narcotráfico.