Kaláshnikov deja los ''Cuernos de Chivo'' y fabrica mascarillas ante el COVID-19
El consorcio ruso Kaláshnikov, uno de los mayores fabricantes de armas del mundo, ha comenzado a fabricar mascarillas y trajes protectores para el personal médico que trabaja en primera línea de la lucha contra el coronavirus.
Según informó hoy la corporación estatal en un comunicado, una de sus filiales, Grupa 99, ya envió la primera partida de 12.500 unidades a clínicas y hospitales.
La compañía, que habitualmente fabrica ropa, trajes especiales y mochilas, tiene una capacidad de producción de 50.000 unidades por semana y planea suministrar hasta 200.000 trajes y mascarillas para finales de mayo.
Los trajes cumplen los requisitos de seguridad más exigentes, mientras las mascarillas desechables son las mismas que utilizan actualmente los empleados del consorcio estatal, según asegura.
Kaláshnikov toma el nombre del legendario armero Mijaíl Kaláshnikov, quien ideó el fusil más popular y mortífero del siglo XX, el AK-47.
El ministro de Sanidad ruso, Mijaíl Murashko, admitió hoy que en lo que se refiere a la hospitalización de pacientes con coronavirus la situación se ha estabilizado, aunque matizó que el país aún no se encuentra "en la meseta" de la pandemia.
Con los 10.699 casos que sumó hoy Rusia, según las autoridades sanitarias, el país alcanzó hoy los 187.859 contagios por COVID-19, a lo que hay que sumar 1.723 muertos.