Suspendidos cuatro funcionarios de prisión en Nueva York por muerte de trans
Cuatro funcionarios de prisión de la cárcel neoyorquina de Rikers Island fueron suspendidos sin salario este viernes por la muerte de la transexual Layleen Polanco en una celda de confinamiento en esas instalaciones el 7 de junio de 2019, un caso que ha desatado una oleada de críticas.
"La muerte de Layleen Polanco ha causado un momento de increíble dolor en nuestra ciudad", dijo el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, en un comunicado en el que informó de que los cuatro funcionarios, entre los que se encuentra un capitán, y otros trece funcionarios del Departamento de Prisiones afrontan acciones disciplinarias.
De Blasio calificó lo ocurrido de "absolutamente inaceptable" y remarcó que "es necesario que (los responsables) rindan cuentas".
"Estamos comprometidos a asegurar que todas nuestras instalaciones son seguras y humanas. Incluso una muerte producida bajo nuestra custodia es demasiado, y este cambio y justa determinación en la disciplina interna deja claro que la seguridad y el bienestar de la gente bajo nuestra custodia sigue siendo nuestra principal prioridad", aseguró, por su parte, la Comisaria del Departamento de Prisiones, Cynthia Brann.
Polanco, quien según el informe forense murió como consecuencia de un ataque de epilepsia, fue confinada por sus carceleros a pesar de las objeciones mostradas por un médico y de las convulsiones que había sufrido recientemente, de acuerdo a un informe interno del correccional.
De 27 años y origen dominicano, Polanco había sido trasladada a Rikers tras ser acusada de delitos menores y de no haber pagado una fianza de 500 dólares.
Polanco, que sufría epilepsia, fue arrestada el 13 de abril del año pasado y trasladada en un primer momento a una comisaría en el barrio de El Bronx, donde sufrió un ataque epiléptico, por lo que fue ingresada en un hospital donde permaneció tres días.
Tras recibir el alta fue transportada a la cárcel municipal de Rikers Island, donde, según el informe interno de la prisión, volvió a tener problemas de salud, a los que se sumó un gran estrés, por lo que también fue referida a la unidad de salud mental.
La publicación del informe esta semana, reconociendo fallas en la actuación de los funcionarios, desató una renovada oleada de críticas contra lo sucedido, entre ellas la de Alexandria Ocasio-Cortez, congresista por el distrito 14 de Nueva York, donde se encuentra la prisión, que pidió que se tomaran medidas contra los funcionarios implicados.
"Los oficiales de correccional involucrados deben ser despedidos y debemos poner fin al confinamiento en solitario", sostuvo Ocasio-Cortez, de origen puertorriqueño y que el pasado martes se impuso por amplio margen en las primarias demócratas en esta ciudad.
El informe destaca, entre otras cosas, que los funcionarios no supervisaron la situación de la presa como indican las normas y que trataron de despertar a Polanco durante casi una hora y media antes de pedir ayuda médica.
Un informe realizado por el Departamento de Investigación de la ciudad, que supervisa a empleados y contratistas, y de la Fiscalía de El Bronx, que se dio a conocer a principios de junio, había concluido que el personal de Rikers no tiene responsabilidad penal por la muerte de Polanco, pese a que reconoce que no fue supervisada como se exige en esos casos.