Emma Coronel pasa encerrada 22 horas al día; sólo la sacan a un saloncito
Emma Coronel, esposa del narcotraficante Joaquín El Chapo Guzmán, pasa sus días en la cárcel en Estados Unidos leyendo en una celda en la que permanece encerrada unas 22 horas al día en centro de detención en Alexandria, en el estado de Virginia.
La abogada Mariel Colón, que forma parte del equipo de defensa de Coronel, dijo que ha pedido mejores condiciones de confinamiento para su clienta ya que los empleados de la prisión sólo sacan a Emma de la celda en la madrugada para ir a un “saloncito interior”.
“Sus condiciones de confinamiento aún no mejoran. Está casi todo el día encerrada”, aseguró la abogada.
Coronel, de 31 años, fue detenida en febrero en el aeropuerto Dulles International, a las afueras de Washington, al ser acusada de participar en una asociación ilícita para traficar cocaína, metanfetaminas, heroína y mariguana.
Estados Unidos la acusa además de haberse unido a otros para ayudar a Guzmán Loera a escapar de la cárcel del Altiplano, en Almoloya de Juárez, México, en julio de 2015.
Coronel no comparte celda con otras presas, dijo Colón, quien no respondió preguntas sobre si habla a menudo por teléfono con las dos hijas gemelas que tiene con El Chapo.
“Solamente sale de su celda cuando la sacan al saloncito interior. Más nada. Desafortunadamente no ofrecen, no hay, actividades disponibles para que se pueda distraer. Lo único que puede hacer mientras está adentro de su celda es leer”, dijo su abogada.
Tras el arresto de Coronel, una jueza ordenó en una audiencia que permanezca detenida temporalmente mientras otro miembro de su equipo de defensa, el abogado Jeffrey Lichtman, explora una posible solicitud de fianza.
Según investigadores estadunidenses, Coronel pasó de 2012 a 2014 mensajes de parte de Guzmán a otros miembros del cártel para proseguir con las actividades de narcotráfico mientras él evadía a las autoridades mexicanas.
Tras el arresto El Chapo, en febrero de 2014, Coronel siguió pasando los mensajes que su marido le daba cuando ella lo visitaba en prisión en México, aseguran los investigadores.