Ni bomba ni atentado, es un lamentable accidente, dice presidente de Cuba
"No ha sido una bomba ni un atentado, es un lamentable accidente", afirmó el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, tras la explosión en el Hotel Saratoga, que ha dejado ocho muertos, una treintena de lesionados y al menos 13 desaparecidos.
El primer secretario del Partido Comunista de Cuba en La Habana, Luis Antonio Torres Iríbar, había dicho: "Estamos hablando de un accidente" del cual "se investigan las causas" y que "no se está hablando de atentado ni nada de eso", reportó 14ymedio.com.
Hotel, sin turistas
No se alojaron turistas en el Hotel Saratoga de 96 habitaciones porque estaba en remodelación, dijo el gobernador de La Habana, Reinaldo García Zapata, al periódico oficialista Granma.
Granma dijo que las autoridades locales reportaron 13 personas desaparecidas y unas 30 heridas. Una escuela de al lado fue evacuada y los medios de comunicación locales dijeron que ninguno de los niños resultó herido.
La policía acordonó el área mientras los bomberos y los equipos de ambulancia trabajaban en el interior.
"Estoy bien, no nos sacaron"
El fotógrafo Michel Figueroa dijo que pasaba caminando por el hotel cuando “la explosión me tiró al suelo y todavía me duele la cabeza... Todo fue muy rápido”.
Yazira de la Caridad, madre de dos hijos, dijo que la explosión sacudió su casa a una cuadra del hotel: “Todo el edificio se movió. Pensé que era un terremoto”, dijo. “Todavía tengo el corazón en la mano”.
Mayiee Pérez declaró que se apresuró al lugar luego de recibir una llamada de su esposo, Daniel Serra, quien trabaja en una casa de cambio dentro del hotel. Ella dijo que él le dijo: “Estoy bien, estoy bien. Nos sacaron”, pero no había podido comunicarse con él desde entonces.
El Saratoga: un hotel cinco estrellas
El Saratoga se encuentra en un edificio de estilo neoclásico construido en 1880 y que desde 1933 funciona como un hotel. Su última restauración tuvo lugar en 2005, según medios oficiales.
Con cinco estrellas, el hotel es considerado uno de los más lujosos de la ciudad.
El establecimiento se encuentra en pleno Paseo del Prado, una de las principales avenidas de la Habana Vieja, en el centro histórico de la capital cubana.