Assange, fundador de WikiLeaks, promete combatir extradición de Reino Unido a EU
La esposa de Julian Assange prometió luchar por todas las vías legales posibles después de que la ministra británica del Interior, Priti Patel, aprobó el viernes la extradición del fundador de WikiLeaks a Estados Unidos para que se enfrente a cargos penales.
Las autoridades estadounidenses reclaman a Assange por 18 cargos, entre ellos el de espionaje, en relación con la publicación por parte de WikiLeaks de grandes cantidades de documentos militares y cables diplomáticos confidenciales de Estados Unidos que, según Washington, han puesto vidas en peligro.
Sus partidarios afirman que es un héroe antisistema que ha sido víctima por haber sacado a la luz las irregularidades cometidas por Estados Unidos en los conflictos de Afganistán e Irak, y que su procesamiento es un ataque por motivos políticos contra el periodismo y la libertad de expresión.
Su esposa Stella dijo que Assange apelará después de que el Ministerio del Interior anunció que su extradición había sido aprobada, ya que los tribunales británicos concluyeron que no sería injusta o un abuso del proceso.
"Vamos a luchar contra esto. Vamos a utilizar todas las vías de apelación", dijo Stella Assange a los periodistas, calificando la decisión de "parodia". "Voy a pasar cada hora de vigilia luchando por Julian hasta que esté libre, hasta que se haga justicia".
Su hermano, Gabriel Shipton, dijo a Reuters que la apelación incluirá nueva información no llevada previamente a los tribunales, incluyendo las afirmaciones hechas en un informe el año pasado sobre planes para asesinarlo.
En un principio, un juez británico dictaminó que Assange, de 50 años, no debía ser deportado, alegando que su salud mental suponía un riesgo de suicidio si era condenado y recluido en una prisión de máxima seguridad.
No obstante, esta decisión fue revocada en una apelación después de que Estados Unidos entregó un paquete de garantías, incluida la promesa de que podría ser trasladado a Australia para cumplir cualquier condena.
El Ministerio del Interior dijo que los tribunales no habían considerado que la extradición fuera incompatible con sus derechos humanos, incluido su derecho a un juicio justo y a la libertad de expresión, y que sería tratado adecuadamente.
Assange, de origen australiano, lleva más de una década de lucha legal en Reino Unido, que ahora podría prolongarse durante muchos meses más.
Ahora tiene 14 días para apelar ante el Tribunal Superior de Londres, que debe dar su visto bueno a la impugnación y, en última instancia, podría intentar llevar su caso al Tribunal Supremo del Reino Unido y al Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
"No hemos llegado al final del camino", dijo Stella Assange, calificando la decisión de Patel como "un día oscuro para la libertad de prensa y para la democracia británica".