PGR aún no recibiría orden de extradición para Eugenio Hernández
El ex gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández, fue detenido este viernes por la Procuraduría General de Justicia del estado por los delitos de peculado y lavado de dinero. En las últimas semanas el ex mandatario promovió diversos amparos ante jueces de Distrito de la Ciudad de México para evitar ser detenido y para que se le dé acceso a las carpetas de investigación en su contra. En Estados Unidos fue emitida una orden de captura en contra de Eugenio Hernández por lavado de dinero, sin embargo, en México aún no ha sido emitida ninguna orden de este tipo con fines de extradición, lo que significa que el gobierno estadounidense no ha realizado el trámite correspondiente para solicitar su detención y entrega.
El pasado 10 de abril de 2017 la Subprocuraduría Jurídica y de Asuntos Internacionales de la PGR afirmó no tener conocimiento de alguna orden de aprehensión contra el ex mandatario para lograr su envío a EU. La orden fue emitida en 2015 por la Corte Federal del Distrito Sur de Texas con sede en Corpus Christi por lavado de dinero, transmisión ilegal de dinero y defraudación bancaria.
Además de las investigaciones realizadas por las autoridades estatales en 2009, la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) inició una averiguación previa en su contra por supuestamente estar vinculado con el Cártel del Golfo y los Zetas.
En dicha investigación también estuvo involucrado su antecesor Tomás Yarrington Ruvalcaba contra quien en 2015 la SEIDO solicitó una orden de aprehensión y determinó el no ejercicio de la acción penal contra Eugenio Hernández al indicar que no existían pruebas suficientes.
Uno de los testigos clave de la investigación, "Ángeles", quien se ostentó como enlace entre el gobierno de Tamaulipas y el Cártel del Golfo, declaró que en 2004 habló con sus líderes para que autorizaran la candidatura de Eugenio Hernández a la gubernatura del estado, como sucesor de Yarrington.
Otro de los testigos identificado como "El Pitufo", quien reconoció ser jefe de escoltas del dirigente de plaza del CDG en Ciudad Victoria, Tamaulipas, indicó que la organización se dedicaba a coptar autoridades mediante pagos millonarios para brindar protección a los integrantes del brazo armado del Cártel, Los Zetas; que también se dedicaban a brindar regalos a los candidatos durante las campañas políticas, préstamos para las constructoras de los políticos, cobro de piso y tener relaciones con los tres niveles de gobierno en el estado.
Según la averiguación previa PGR/SIEDO/UEIDC5/240/2012 Los Zetas no sólo ejercieron control en la entidad durante la gestión de Yarrington Ruvalcaba, sino también durante la Administración de Eugenio Hernández.
Tal es el caso del ex edil de Nuevo Laredo, Benjamín Galván Gómez, quien según las declaraciones de los testigos fue amedrentado por Miguel Ángel Treviño Morales "El Z-40", desde que era candidato a la presidencia municipal. Que durante el gobierno de Eugenio Hernández, el ex presidente municipal de Nuevo Laredo, Ramón Garza Barrios, dejó deudas que sumaban mil 800 millones de pesos, por lo que Galván Gómez pedía dinero para pagar a los proveedores además de que debía reunir recursos para pagar el derecho de piso que le requería Treviño Morales.