El presidente de México, Enrique Peña Nieto, firmó hoy el decreto para convertir el archipiélago de Revillagigedo, en el océano Pacífico, en un parque nacional que será el más grande de América del Norte y permitirá proteger las centenares de especies que habitan en él.

"Esta maravillosa área natural protegida constituye un invaluable patrimonio de México, y también una enorme responsabilidad", dijo el mandatario en su discurso previo a la firma del decreto del Parque Nacional de Revillagigedo en la residencia de Los Pinos.

Para tal motivo, continuó el gobernante, "se ha tomado la decisión de convertir el archipiélago de Revillagigedo en un parque nacional que será el más grande de América del Norte, y dotándolo de la mayor protección posible".

Conformado por cuatro islas -Socorro, San Benedicto, Roca Partida y Clarión-, el archipiélago de Revillagigedo está ubicado en el Pacífico a 390 kilómetros al suroeste de la punta sur de la Península de Baja California y a 700 kilómetros del occidental estado de Colima.

Cuenta con imponentes acantilados, litorales y volcanes que son parte de una cordillera submarina.

"El decreto que hoy suscribo da cumplimiento al compromiso de México de asegurar la conservación de este archipiélago excepcional. Esta medida permitirá la conservación de cientos de especies marinas, muchas de ellas en riesgo", apuntó el mandatario.

El archipiélago es hoy una joya del medio ambiente. Alberga hasta 750 especies animales como tiburones, rayas, ballenas jorobadas, peces o tortugas, y 233 tipos de plantas, decenas de ellas endémicas.

Las islas, declaradas en 2016 Patrimonio Mundial Natural por la Unesco, no están exentas de peligros.

La zona ha padecido impactos ambientales desde que se descubrió en 1533. Así, en las islas se ha reducido la fauna silvestre y sufre la presión de la pesca industrial, el cambio climático y los efectos de los huracanes.

"La pesca que no es sostenible no puede ser admisible", dijo Peña Nieto.

Para remediar esta situación, detalló, el parque nacional comprenderá 14,8 millones de hectáreas para "permitir la conservación de cientos de especies marinas, muchas de ellas en riesgo, y contribuir a mantener la conectividad de los ecosistema del océano Pacífico".

Esta enorme extensión equivale al territorio del norteño estado de Coahuila o a cien veces la Ciudad de México, ejemplificó el mandatario.

En esta zona se prohibirá toda actividad pesquera, la extracción de cualquier recurso natural y la construcción de infraestructura hotelera.

Además, tendrá una partida presupuestaria -no detallada- y contará con el trabajo conjunto de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) y la Secretaría de Marina (Semar), entre otras instituciones.

El titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano, aseguró en este acto que dichas instituciones tienen "el mejor mecanismo para garantizar la protección adecuada" del archipiélago, y recordó que los parques nacionales son las "figuras más restrictivas" de la ley.

Subrayó que las islas tienen un incalculable valor medioambiental y son, por ejemplo, una "guardería" o "criadero" para especies tan especiales como la ballena jorobada o el tiburón de puntas blancas.

La pareja que desapareció desde julio pasado en el Parque Nacional Joshua Tree en el desierto de Mojave de California, y cuyos cuerpos habrían sido hallados "abrazados" durante el pasado fin de semana, habrían muerto en un asesinato-suicidio, dijeron hoy las autoridades.

Los investigadores señalan que Joseph Orbeso, de 22 años, disparó y mató a su novia, Rachel Nguyen, de 20 años, para después pegarse un tiro, según un comunicado difundido este viernes por la oficina del sheriff de San Bernardino.

Según "Los Angeles Times", Cindy Bachman, vocera de la policía local, señaló que los agentes encontraron un arma de fuego en la escena donde los cuerpos de la joven pareja fueron encontrados en una posición que hacía pensar que habían muerto abrazados.

Los jóvenes fueron reportados como desaparecidos el pasado 28 de julio luego de que el dueño de su Airbnb en Morongo Basin informara a la policía que ambos habrían salido a caminar por el Parque Joshua Tree.

Ese día, las autoridades encontraron el auto de la pareja cerca de un sendero y así comenzó la búsqueda para dar con su paradero, una de las más grandes y largas jamás realizadas en esa región, con "agentes de rescate, voluntarios, perros, caballos y helicópteros" que pasaron meses buscándolos.

Durante el pasado fin de semana, casi tres meses después de que la pareja fue reportada como desaparecida, un guardia del parque encontró sus cuerpos dentro de un angosto cañón al norte del sendero Maze Loop.

De acuerdo con la evidencia encontrada en la escena, "los detectives creen que Orbeso le disparó Nguyen y luego se disparó a sí mismo. Aún se investigan las acciones del joven y sus motivos", señaló la policía.

Los resultados de la investigación surgen luego de que Gilbert Orbeso, padre del joven, identificó públicamente a la pareja y las autoridades dijeron que fueron hallados "abrazados" en medio del desierto.

"La forma en la que fue encontrado junto a Rachel, abrazándola como si estuvieran buscando sombra dice todo lo que deberían saber sobre él como hombre y como ser humano", dijo Gilbert a "Southern California News Group" en un correo electrónico.

Las autoridades no reportaron las heridas de bala cuando anunciaron el hallazgo de los cuerpos porque las lesiones debían ser confirmadas y los cadáveres identificados, lo que llevó tiempo debido al grado de descomposición de estos tras pasar meses en el desierto, señaló la vocera de la policía.

"Por la posición de sus cuerpos, parecía que se estaban abrazando", detalló.

Como medida de seguridad para quienes visitan el Parque Nacional de San Pedro Mártir y luego de que tres estadunidenses se perdieran en el lugar en recientes fechas, las autoridades ambientales tomaron la decisión de solicitar toda la información posible sea brindada  al guarda parque de quienes accedan al sitio al momento de llegar al paraje natural, señaló Gonzalo de León Girón, encargado del parque nacional y representante de la Secretaría de Protección al Ambiente (SPA) y la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).

“Estamos haciendo una serie de recomendaciones para la visita al parque. Se trata de llegar con el guarda parque y dar datos como: dónde van a acampar, qué es lo que van a hacer, los días y sitios de estancia. Además de responder una encuesta donde se les pregunta si desean ir a lugares como el Picacho del Diablo, pues es necesario contar con varios requisitos como avisar a Protección Civil.”, explicó.

Recomendó de preferencia visitar la zona con un guía, si nunca lo han visitado. Si van a otros sitios, como senderos ya establecidos, decirle al guarda parque para que tenga conocimiento. Ir con agua, combustible, pedir información.

"En caso de que vayas al bosque y te sientas perdido en cualquier parte, siempre quedarte en tu lugar. Si dijiste a tus familiares que ibas a regresar tal día, se va a hacer una búsqueda intensiva”, detalló el funcionario.

De León Girón señaló que actualmente el clima actualmente es agradable, pues la temperatura máxima está a 25 grados y las mínimas a 15 grados, y que a diferencia de las 2 mil personas que suelen acudir durante el invierno, en estas fechas entre julio y agosto suelen acudir aproximadamente mil personas.

Para los interesados en visitar el parque nacional Sierra de San Pedro Mártir, pueden comunicarse a la oficina (646) 172-30-00, a la extensión 3229, para conocer todos los requerimientos, así como horarios de visita al museo y observatorio, además de recomendaciones al momento de acampar o visitar sitios agrestes.