Por segunda ocasión en 15 días, la oposición reventó el quórum en la sesión ordinaria de la Cámara de Diputados y evitó que el dictamen del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) para prohibir los delfinarios, fuera aprobada.
Tras un largo debate de casi tres horas, con oradores a favor y en contra, los grupos parlamentarios del PAN, PRD, Morena y MC no votaron a pesar de estar presentes en el salón de sesiones, con lo que solamente votaron los priístas, los integrantes del Verde, Encuentro Social y Panal, sin embargo, no alcanzaron el quórum y alcanzaron 231 votos a favor, 0 abstenciones y un voto en contra.
Para avalar una ley, que no sea constitucional, el pleno de la Cámara de Diputados requiere del voto de 251 legisladores, pero en esta ocasión sólo se llegaron a 233.
El pasado 6 De abril, ocurrió lo mismo que este día 20, y la intención del Partido Verde y del PRI en la Cámara de Diputados de aprobar un dictamen para prohibir los delfinarios en todo el país, generó que la oposición -integrada por el PAN-PRD-Morena y MC- se unieran y reventaran la sesión ordinaria y el debate de este dictamen se pospusiera hasta que regresaron de vacaciones por la Semana Santa los legisladores.
La Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputados aprobó por 11 votos a favor, 7 en contra y 2 abstenciones, las reformas al artículo 60 de la Ley General de Vida Silvestre, con el fin de prohibir la operación de delfinarios y la inhibición de la reproducción de especies dentro de los mismos en México.
El cambio a la ley precisa que queda prohibida la utilización de ejemplares de mamíferos marinos en espectáculos fijos o itinerantes, así como cualquier actividad que involucre a estas especies y que no tenga por objeto la investigación científica y la educación superior de instituciones acreditadas.
El grupo presidido por el diputado Arturo Álvarez Angli, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), determinó también que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) contará con un plazo de 6 meses para integrar un registro de mamíferos marinos en cautiverio, con la finalidad de que no haya un cambio o suplencia de los mismos.
El coordinador del grupo parlamentario del PVEM, Jesús Sesma Suárez, señaló que existe un total de 387 mamíferos marinos en todos los delfinarios del país, de los cuales el 70% son delfines. Explicó también que con el dictamen no se cierran los delfinarios de facto, en cambio, se contempla una última generación de las actuales especies que se encuentran en los delfinarios.
Aseguró que, a decir de la Secretaría de Salud, la delfinoterapia tiene poca evidencia científica de efectividad y es poco reconocida. Respecto a las afectaciones que sufrirán los delfines por la falta de oportunidad de reproducción dentro de estos espacios, declaró: “prefiero tener 270 delfines mártires por las futuras generaciones de la especie”.
Entre legisladores de otros grupos parlamentarios los comentarios a las reformas se enmarcaron como críticas en contra. El diputado Francisco Javier Pinto Torres, de Nueva Alianza, se manifestó en contra de esta decisión pues, aseguró, va en tendencia prohibicionista y apuntó que se necesita de más tiempo para su análisis.
Por su parte, el diputado Sergio Emilio Gómez Olivier, del Partido Acción Nacional, consideró que esta acción evitará la reproducción de delfines para su reinserción. “Debe galardonarse este tipo de instalaciones, en lugar de prohibirse”, dijo. Destacó el caso de la ballena Keiko que, tras ser liberada, seguía buscando humanos para interactuar con ellos y proveerse de alimento, por lo que después falleció.