El 8 de septiembre que inicia el proceso electoral federal, las calles, las redes sociales, la radio y la televisión deberán quedar libres de propaganda o spots partidistas en los que se promuevan funcionarios públicos, dirigentes, voceros de partidos o personajes que busquen una candidatura a cualquier nivel.
No hacerlo y rebasar con esos gastos los topes de precampaña, podrán motivar la negativa de registro de una candidatura, según acordó el Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) en dos lineamientos aprobados este jueves, con el rechazo de siete de nueve partidos políticos, entre ellos, PRI y Morena, que se unificaron en su intento —sin éxito— de posponer las reglas.
Mediante los lineamientos que regirán a la Comisión de Quejas, al valorar quejas contra spots en los que aparezcan dirigentes partidistas, y las normas para garantizar la equidad entre los participantes en la contienda, el instituto pretende establecer reglas de "cancha pareja" para los comicios presidenciales, federales y locales de 2018.
A partir de la aprobación de ambas normas ayer, comenzó a correr la cuenta regresiva de 50 días en la que podrá seguir el flujo de recursos para posicionarse, y los líderes y voceros de partidos podrán estar al aire en los promocionales con cargo a las prerrogativas de sus partidos.
Pero a partir del 8 de septiembre todo debe quedar retirado, so pena de ser objeto de fiscalización y sumatoria para efectos de rebase de precampaña y campaña.
El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, advirtió que el organismo no busca asfixiar la política ni afectar los derechos a la libre expresión, de prensa o de información.
Los medios de comunicación podrán mantener sus coberturas y entrevistas sin límite —salvo que haya pago— y los políticos de cualquier carácter podrán seguir expresándose en sus redes sociales personales, siempre que no paguen la promoción.
Van por más reglas. El 28 de junio, el INE alistaba aprobar límites a la aparición de dirigentes o voceros en los promos de sus partidos, los pospuso y los avaló ayer junto con lineamientos para acotar el activismo con recursos públicos y privados de todo tipo de aspirante con o sin cargo público.
Estas últimas reglas marcan que todo servidor público que aspire a una postulación no podrá acudir a actos de entrega de programas sociales. Tampoco podrán, después de la fecha límite, rendir informes legislativos o de gestión —salvo que la ley permita hacerlo—, pero no podrán promover su nombre, imagen o logo.