No basta con ayuda asistencialista ante migración de haitianos
En el caso del flujo migratorio de haitianos y africanos que está sucediendo en Tijuana, se debe entender que para solventar la situación no se trata solamente de proporcionar ayuda asistencialista, sino también otro principio que es lo subsidiarismo, es decir, ayudar a las personas pero en un momento dado, promover para que ellos mismos se empiecen a desarrollar, y que esto se haga de modo inclusivo, así lo señaló Gerardo Cruz González, investigador en el Instituto Mexicano de Doctrina Social Cristiana (Imdosoc).
Tras la presentación del informe "Frontera cerrada: crisis migratoria de haitianos y africanos varados en la frontera con Estados Unidos", el investigador señaló que el objetivo de este trabajo, es dar cuenta de la situación de los migrantes afrodescendientes en Tijuana y detalló que dentro de los datos que arrojó la investigación respecto a los perfiles de éstas personas, encontraron que hay más varones en edad productiva entre 18 y 29 años y que la mayoría ya están comenzando a integrarse económicamente en la ciudad.
Además que se ha reconocido que la ayuda que ha proporcionado hasta ahora el gobierno federal, estatal y municipal solamente ha sido asistencialista y que la gran carga de asistencia humanitaria ha venido de organizaciones de la sociedad civil, especialmente grupos religiosos, tanto católicos como iglesias cristianas y evangélicas.
En ese sentido, dijo, Tijuana así ha crecido, pero esta nueva migración de haitianos y africanos representa "un reto" para lograr esto y "no quedarnos en el asistencialismo porque es una práctica que no conduce realmente al desarrollo de las personas ni a la integración social".
Sobre la nula participación que han tenido hasta el momento las organizaciones sociales internacionales, en comparación con otros países donde también existe el contexto migratorio, Cruz González resaltó que a veces estos organismos no perciben la realidad completa, dura y de frente que se vive en ciudades fronterizas como Tijuana; una vez que las organizaciones tengan una interpretación más concreta de lo que sucede, podrán promover la ayuda humanitaria, en caso de que se necesitara, o promover políticas públicas desde organismos internacionales, para así poder generar un cambio de perspectiva pero también de actuación ante este flujo migratorio.