Convierten al Santo Niño de Atocha en el ‘Santo Niño Huachicolero’
El atuendo puede variar, pero los elementos que nunca faltan en el altar del llamado ‘Santo Niño Huachicolero’ con la manguera y los bidones para el combustible ordeñado.
La cultura huachicolera se ha propagado a diversos rubros de la vida cotidiana de quienes se dedican a robar combustible de los ductos, ahora también ha llegado a tocar su fe y la devoción religiosa.
La imagen religiosa que ahora adoran los que se dedican a este ilícito, es resultado de una modificación al ‘Santo Niño de Atocha’, no se sabe con precisión cómo comenzó, pero ocurre.
Versiones apuntan que, la veneración de esta imagen se hizo visible a raíz del Día de La Candelaria, fecha en la que los atavíos para ir a bendecir al Niño Dios fueron acompañados con mangueras y botecitos que simularon a los contenedores para almacenar el combustible.
La adoración del ‘Santo Niño Huachicolero’ ocurre entre pobladores del llamado triángulo rojo, que pasa por varios municipios del estado de Puebla, y que es la franja donde se ha registrado el crecimiento de la práctica ilícita de ordeña de ductos.
Por supuesto, esta imagen no es reconocida por la Iglesia Católica, incluso, es considerado como una ‘distorsión de la devoción’.
Derivado de la popularidad que ha adquirido, la Arquidiócesis de Puebla ha llamado a los fieles católicos a no promover la adoración de esta imagen.