Estados Unidos ordenó el jueves suspender la importación de tomates provenientes de una compañía agrícola mexicana y sus subsidiarias por lo que las autoridades catalogaron como un trato abusivo hacia sus trabajadores que equivale a trabajo forzado.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP por sus iniciales en inglés) emitió una orden para detener los envíos de Agropecuarios Tom, con sede en San Luis Potosí, localizado en el centro de México.
La agencia indicó que su investigación reveló evidencia de engaño, retención de salarios, servidumbre por deudas y otras condiciones laborales y de vivienda abusivas. Añadió que el gobierno mexicano tomó medidas contra la misma empresa por acusaciones de trabajo forzado en octubre de 2020.
EMPRESA NIEGA ACUSACIONES
Agropecuarios Tom negó las acusaciones en general, pero señaló que espera más detalles de la CBP a fin de poder responder adecuadamente.
Rommel Fernandez Veraud, representante legal de Agropecuarios Tom, dijo que la medida les generó sorpresa dado que la compañía cumple con las reglas tanto de Estados Unidos como de México.
En los últimos años, el gobierno de Estados Unidos se ha apoyado cada vez más en el uso de las llamadas órdenes de liberación de retención para bloquear las importaciones de productores o fabricantes relacionados con el trabajo forzado, en medio de una conciencia pública creciente sobre el tema.
Las órdenes, que obligan a las compañías estadounidenses a indagar más profundamente en las prácticas dentro de su cadena de suministros, se mantienen vigentes hasta que los productores o fabricantes citados puedan ofrecer evidencia de que han corregido las prácticas abusivas.
Reportes de medios han hallado que trabajadores en condiciones similares a la esclavitud en campos de todo México que abastecen a las compañías alimenticias de Estados Unidos.