Debido a que se da atención a bebés prematuros del Hospital General de Tijuana, al Hospital Materno Infantil, así como a los hospitales generales de Ensenada y Playas de Rosarito, para mejorar su estado de salud, el Banco de Leche Humana invita a las mamás en estado de lactancia, a sensibilizarse y donar leche.
La doctora Julieta Concepción Pachecho Simón, responsable del Banco de leche humana, indicó que en promedio se requiere de 10 litros de leche diariamente para alimentar a bebés prematuros que se encuentran en la Unidad de Cuidados Intensivos, y que por el estado de salud de sus mamás que en ocasiones no tienen leche o su producción es muy baja, se requiere del alimento donado para sacarlos adelante.
Incluso dijo, si las mamás donadoras no pueden acudir al banco de leche ubicado en el Hospital General, incluso por temor a infectarse de COVID-19, aclaró que existen protocolos sanitarios para ingresar al área, además de que se encuentra a un costado del nosocomio, no tienen que entrar ni ponerse en riesgo.
Así mismo, actualmente se está ofreciendo el ir a domicilio por la donación, sólo tienen que ponerse en comunicación a los números telefónicos (664) 684-0078 al 80, en la extensión 2410, y se acude hasta su casa.
Pachecho Simón reconoció que al menos el 30% de las mujeres, por mitos de que van a perder su figura no amamantan a sus bebés, cuando por el contrario, esto les da muchos beneficios también para ellas.
Explicó que el dar lactancia materna, ayuda a que el útero vuelva más rápido a su estado original, a bajar más rápido de peso y por consecuencia a regresar a la silueta que tenían previamente al embarazo, y sus mamas no se van a deformar, esas van a seguir iguales además de protegerlas porque minimiza el riesgo de contraer cáncer de mama.
El período obligatorio mínimo es de 6 meses, pero puede ampliarse hasta los 2 ańos la lactancia, e incluso hay mamás que siguen por más tiempo.
Por su parte, Perla Beltrán, enfermera de lactario y banco de leche para nińos prematuros, expuso que el procedimiento de recolección de leche implica ver el estado de salud de la donante, se les entrega gorritos y cubrebocas, se les enseńa el lavado de manos y cómo hacer la extracción manualmente, cómo congelarla y trasladarla de su casa al banco de leche.
Cuando es primera vez la donación se acepta la leche en bolsitas de plástico, pero una vez que ya se inicia el proceso, se les otorga frascos de vidrio y tapa de plástico esterilizados que se les presta por parte del hospital, y que son de diferentes tamańos de acuerdo a su producción. La leche es un tejido que pierde sus nutrientes por lo que no puede durar en refrigeración más de un mes, concluyó.