El 2 de agosto de 1968 la Ciudad de México no sólo fue testigo de las movilizaciones estudiantiles que llevaban ya una semana contra la represión policíaca, sino que también ese día ocurrió un hecho que, literalmente, cimbró a la capital mexicana y parte del país: un temblor de magnitud 7.1, con epicentro en Oaxaca y que ocasionó al menos 17 muertes.

En su edición del 3 de agosto EL UNIVERSAL informó que el sismo fue registrado por los aparatos del entonces Sismológico de Tacubaya y que tuvo una duración de 72 segundos en la metrópoli.

"El macrosismo que inició a las 8:08 horas, tipo oscilatorio creó un estado colectivo de pánico que originó múltiples escenas de intenso dramatismo en todos los rumbos de la ciudad". La nota de El Gran Diario de México detallaba que el epicentro del fenómeno natural, que se localizó en la zona limítrofe de Guerrero y Oaxaca, causó desperfectos en las redes telefónicas y eléctrica paralizando momentáneamente la ciudad.

Además, el temblor fue responsable de diversos daños materiales en la Ciudad de México, entre ellos, la caída de una barda en Bucareli, el cierre del Cine Paseo, el derrumbe de infraestructura en una gasolinera - ubicada en la esquina de Niño Perdido y José T. Cuellar- lo que ocasionó el daño a diversos autos. Se detalla además que dos edificios fueron demolidos y otros nueve fueron rehabilitados.

El extinto cine Paseo, ubicado en Paseo de la Reforma 35, suspendió por varios días sus funciones debido a los daños que sufrió por el temblor.

Sin embargo, fue en Pinotepa Nacional, Oaxaca donde ocurrieron los daños más graves, al registrarse al menos 15 muertos, por lo que fue declada como "zona de desastre".

Carlos Ortiz Ortiz, corresponsal de EL UNIVERSAL en Oaxaca reportó que Jamiltepec, Huascalitepec, Pinotepa, Tlacanam, fueron comunidades que se encontraban incomunicadas en su totalidad.

"En Pinotepa Nacional, la situación es grave a todas luces. 14 mil habitantes se encuentran viviendo a la interperie y bajo las aguas, ya que cayó un torrencial aguacero esta tarde, debido a que sus casas fueron destrozadas por el movimiento telúrico. El centro de salud de esta población atiende a decenas de heridos".

Junto a la nota del sismo, bajo el título "En la UNAM a Estudiar; Peticiones en el Politécnico", se detalla que las autoridades de las máxima casa de estudios del país anunciaban que tras dos semanas de enfrentamientos entre estudiantes, granaderos y soldados, los alumnos de preparatoria regresarían a clases al día siguiente.

"La mayoría (de los preparatorianos) al parecer están preocupados por prepararse para los exámenes. La Universidad anunció que éstos se efectuarán desde el 29 de agosto y terminarán el 7 de septiembre. La Escuela Nacional Preparatoria no cuenta con un sistema semestral en sus cursos y este año se adelantó el periodo de exámenes con miras a que en octubre los estudiantes no tengan que asistir a sus planteles".

Un anuncio de la extinta Luz y Fuerza del Centro en la página 8 avisaba a los capitalinos que al día siguiente, por trabajos de reconstrucción en la infraestructura eléctrica sería suspendido el servicio en la colonia Moctezuma, en el sector Tlalnepantla, Naucalpan y Santa Clara (Estado de México).

México conmemora los 53 años de la llamada "matanza de Tlatelolco" del 2 de octubre de 1968, frente a la Plaza de las Tres Culturas. Jóvenes, niños y adultos se reunieron esta tarde en diversos lugares de la Ciudad de México para recordar el movimiento estudiantil. 

Es por eso que preparamos un listado con las películas que abordan este tema que ha marcado la historia del México contemporáneo y que sigue presente año con año en nuestro país para que tengas un acercamiento a los qué pasó ese día. 

'El grito' (1968) 

Este documental dirigido por Leobardo López Aretche fue creado por estudiantes del antes Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la UNAM y muestra cómo ocurrió desde el interior este movimiento estudiantil. 

'Rojo Amanecer' (1989) 

Ambientada en un departamento del edificio multifamiliar Chihuahua, en Tlatelolco, esta película se desarrolla en una familia, la cual lucha por mantener seguros a sus hijos del gobierno que reprimió a cientos de jóvenes. 

'Borrar de la memoria' (2011) 

“Hay tanto rollo que ya nadie sabe lo que es la realidad, la fantasía”, se dice en este filme que muestra imágenes de cómo se vivió aquel 2 de octubre de 1968. 

'Tlatelolco, verano del 68' (2012) 

Dirigida por Carlos Bolado, se centra en dos jóvenes que de distintas clases sociales se enamoran en medio de las revueltas vividas hace 48 años. 

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La participación del Ejército en el Movimiento Estudiantil de 1968 fue apegada a derecho y en protección de la población, expone el Estado Mayor de la Defensa Nacional.

La Secretaría de la Defensa Nacional dijo a EL UNIVERSAL que en los acontecimientos en los que participaron militares se actuó con respeto a los derechos humanos.

Sobre la posibilidad de tener acceso al archivo documental de lo ocurrido ese año, el subjefe Operativo del Estado Mayor de la Defensa Nacional, Cruz Isaac Muñoz Navarro, indicó que desde 2001 la secretaría envió esos documentos al Archivo General de la Nación.

El Comité 68 pidió que se reabra la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado, para que recupere las investigaciones que tenía avanzadas, encuentre y dé a conocer el contenido de 123 mil pies (más de 37 mil metros) de película que, asegura, Luis Echeverría mandó filmar durante la jornada del 2 de octubre de 1968 en la Plaza de las Tres Culturas.

El secretario mexicano de Gobernación, Alfonso Navarrete, encabezó hoy la ceremonia de izamiento a media asta de la bandera nacional para conmemorar los 50 años del movimiento estudiantil y la matanza de Tlatelolco de 1968.

En el acto, que se llevó a cabo en la Plaza de la Constitución (Zócalo), estuvieron presentes los presidentes de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Luis María Aguilar, y del Senado de la República, Martí Batres, así como la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Dolores Padierna.

También asistieron coordinadores parlamentarios, legisladoras y legisladores de ambas cámaras del Congreso, así como autoridades de los Gobiernos federal y de Ciudad de México.

En la ceremonia se realizó asimismo el toque de silencio en memoria de las víctimas de la matanza y se entonó el himno nacional mexicano.

El 2 de octubre de 1968, fuerzas de seguridad reprimieron un mitin estudiantil en Tlatelolco con saldo de centenares de muertos, según numerosos relatos, y miles de detenidos.

Integrantes del movimiento de 1968 y estudiantes participarán este martes en la marcha conmemorativa por el aniversario 50 de la matanza de Tlatelolco, con la participación de familiares de los 43 alumnos de la escuela de Ayotzinapa desaparecidos en 2014.

A 50 años de la matanza de estudiantes en la Plaza de la Tres Culturas (Tlatelolco), es tiempo de reconciliación y de reconocer el camino que queda por delante para todos los mexicanos, consideró el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida.

El funcionario federal representó al presidente Enrique Peña Nieto la mañana de hoy 2 de octubre en el izamiento a media asta, de la bandera nacional en el Zócalo capitalino.

La sociedad mexicana, dijo en entrevista, encuentra un camino de conmemorar y de reconciliarse, hecho que debe ser valorado.

¿Alguna vez se llegará a saber con precisión qué fue lo que pasó (el 2 de octubre de 1968)?, se le preguntó al encargado de la política interna del país.

"Creo que la historia y los historiadores han dado cuenta exacta de qué es lo que ocurrió en esos lamentables sucesos", expresó.

A lo largo del tiempo, comentó, se han desclasificado y encontrado documentos de un acervo histórico importante.

"Creo que se han ido desclasificando y encontrando documentos de un acervo histórico importante.

Y lo que vale la pena destacar es que este país y esta sociedad es tan fuerte, que es capaz de reconocer aquellos hechos y sucesos que generaron muerte de personas, que era innecesaria absolutamente, y que podamos conmemorarlos, y este es un muy buen día para reconciliarnos todos y para reconocer el camino que queda por delante para los mexicanos", apuntó.

Con 26 mil pesos en el bolsillo y en un foro cercano al Estadio Azteca, Jorge Fons dio en mayo de 1989 el claquetazo inicial de Rojo amanecer.

El departamento en el que una familia pasaba la masacre estudiantil de Tlatelolco el 2 de octubre de 1968, había sido construido gracias a recuerdos de todos.

Julio, hijo del realizador, llevó muebles propios y los Bichir (Demian y Bruno) sus fotos de niños como decoración; María Rojo y demás, prácticamente no cobraron por su trabajo.

Todos estaban muy comprometidos, fue una película que hicimos sin dinero. El foro lo prestaron, mi hijo llevó los libros y una foto del Che que ahí se ven; los Bichir eran amigos, la hicimos de una manera muy casera", recuerda Fons.

"Entrábamos temprano y salíamos a las 10 u 11 de la noche, todos queríamos hacer un buen trabajo", narra el realizador.

Rojo amanecer fue apoyada inicialmente por Héctor Bonilla y rescatada por Valentín Trujillo, quien fue convencido para inyectar dinero cuando este se acabó.

La cinta, recuerda, fue vista en la Residencia Oficial de Los Pinos por Carlos Salinas de Gortari, entonces Presidente de la República.

Al término de la función, el mandatario solicitó fueran retiradas las escenas donde se hacía mención del ejército y la escena final donde un militar pasaba frente a un edificio. Trujillo aceptó.

"El guión no se había dado a Radio, Televisión y Cinematografía (RTC) porque seguro lo censurarían, sabíamos que estábamos arriesgando todo por algo bueno", comenta Fons.

Pasaron 20 años para que la ficción retomara la matanza estudiantil en la Plaza de las Tres Culturas, en Tlatelolco.

Borrar de la memoria, dirigida por Alfredo Gurrola y Tlatelolco, verano del amor, de Carlos Bolado, se realizaron con meses de diferencia.

La primera tomaba como pretexto el hallazgo de un cadáver femenino y un investigador; gracias a unas filmaciones, se daba cuenta que la víctima había tenido relación con el movimiento del 68.

La segunda fue protagonizada por Cassandra Ciangherotti y Christian Vázquez, abordando los tres meses previos a los hechos del 2 de octubre.

Por año y medio, incluyendo investigación en la hemeroteca de EL UNIVERSAL, Bolado recopiló testimonios de quienes estuvieron en la plaza.

"En una cena me encontré a un hombre que fue a la escuela con los hijos de Díaz Ordaz o a un taxista le preguntaba dónde había estado ese día", recuerda para ir confeccionando la historia.

Las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México le sirvieron para varias escenas de encuentros estudiantiles.

Ahí mismo, durante 1968, Marcela Fernández Violante (Cananea y De todos modos Juan te llamas) arribaba en un auto a cuya parte trasera le habían quitado las calaveras.

A través de ellas y escondidas, se metían las cámaras que lograron tomas del ejército en CU pueden ser vistas en el documental El Grito, de Leobardo López Aretche, zurcido a través de horas de películas creadas durante ese año.

Operación Galeana y Las claves de la masacre son otros documentales de Carlos Mendoza que recurren a material inédito para mostrar el papel del ejército y elementos con guante blanco durante los hechos.

Con tomas aéreas se ve cómo soldados dejan de apuntar a los enguantados al identificarse y testimonios de quienes vieron los muertos en el suelo.

Del batallón Olimpia toma nombre la nueva película ficcionada de José Manuel Cravioto (Mexican gangster).

Utilizando material original en blanco y negro, se cuenta la vida de cinco jóvenes involucrados en distintas áreas del movimiento, como un estudiante de arquitectura, otro de filosfía, uno de derecho y otro del CUEC.

"Ahí me contaron varias anécdotas de cuando hicieron El Grito, las aproveché", recuerda Cravioto.

La cinta competirá en el próximo Festival Internacional de Cine de Morelia.