Joven con esclerosis participará en su quinto Maratón de la CDMX
Su nombre es César Alejandro, tiene 21 años de edad y sufre de esclerosis múltiple desde los siete años.
Él, junto con su madre Sonia, y Edmundo, su ayudante, correrán su quinto Maratón de la Ciudad de México al hilo. Pese a la motivación que han encontrado en el atletismo para salir adelante, el camino no ha sido sencillo para sus familiares.
"Tenía siete años. Al principio dejó de sentir los pies y fue cuando lo llevé al hospital. Me dijeron que tenía esclerosis múltiple, sin embargo, yo no me rendía y lo llevé a otros centros de atención. En todos me dieron el mismo diagnóstico", relató la madre, quien dijo que lidiar con la enfermedad de su hijo ha sido difícil al ser madre soltera.
"Su padre tenía problemas con las drogas. Me dijeron que la enfermedad se le derivó gracias a eso. Es un duelo muy feo como mamá".
Hace cinco años y medio, la familia Rubí Juárez conoció a Edmundo, un carpintero de la zona en donde viven, en Chimalhuacán, y quien invitó a César Alejandro a participar con él.
"Mi hijo me dijo: ¿Cómo ves mamá? A lo que yo le respondí: Adelante", dijo la mujer, quien tiene otros cuatro hijos.
Cuando César Alejandro encontró un nuevo motor de vida y con el consentimiento de su madre, él le dijo: ¿Me vas a dejar solo, mamá?
A Sonia jamás se le había cruzado por la cabeza el despegarse por un par de horas de su hijo, por lo que decidió también correr maratones. "A mí la verdad no me gustaba hacer ejercicio. Lo odiaba. Pero cuando él me dijo eso, para mí fue algo muy fuerte y me puse un reto que tuve que lograr", confesó.
A veces sintió mareos o sensaciones de desmayo. Pensó en abandonar esta meta, pero fue su hijo quien le dio la fuerza de voluntad.
"Mi experiencia de primer Maratón fue inolvidable. Nos levantó y nos llenó de vida".
El cuerpo de César Alejandro se encuentra atrofiado, por lo que participará por última vez en un Maratón el próximo domingo.
"Está muy dañado de salud, está será la última vez que compita en uno. Su obsesión era conseguir las seis medallas para completar el nombre de México y esperemos lo logre".
Por su parte, Edmundo Paz, quien ha acompañado a César Alejandro hasta cruzar la meta los últimos cinco años, relató cómo fue el día en que se conocieron e iniciaron una historia juntos.
"Yo los conocí porque veían que corría todas las mañanas. Un día llegaron a mi taller de carpintería y les propuse la idea".
A partir de ese momento y hasta la fecha, César Alejandro y Edmundo entrenan todos los días una hora y media para las competencias a las que van a participar.
"Me tengo que acomodar con la silla y con él por el peso y todo lo que tenemos que hacer en los eventos que vamos. El único detalle es que como no se puede mover, hay que acomodarlo cada vez que se siente incómodo".
Edmundo describe sus momentos a lado de César Alejandro como "muy bonitos, a veces no lo puedo describir pero lo hago para que César esté feliz".
Paz, de 50 años de edad, señaló que no le cuesta trabajo alguno avanzar con su compañero, salvo que a veces "la gente no va bien preparada y en ocasiones nos estorban el paso".
César Alejandro, tímido y notablemente emocionado, se reservó solamente a decir: "Estoy listo".