Un reto muy significativo tienen los municipios de Baja California frente a la problemática de inseguridad que prevalece y que a pesar de los esfuerzos que realizan, es un tema prioritario para los bajacalifornianos.
Las autoridades municipales tienen en el ámbito de su competencia la implementación de estrategias de prevención y contención del delito, así como la respuesta inmediata a los incidentes suscitados en sus respectivas jurisdicciones, por ello la coordinación resulta fundamental entre el Estado y los municipios.
Se trata de una maquinaria debidamente sincronizada, en donde la estrategia de prevención y persecución del delito debe ser integral y no aislada. Nadie puede apartarse de ese camino ni por interés político o protagonismo podrá hacerlo afirmaron especialistas y analistas en Seguridad consultados por REACCIÓN EN CADENA.
Hasta este momento quien ha generado una sinergia importante en el combate y persecución al delito ha sido la recién creada Fiscalia General del Estado que después de 51 días de haberse constituido y fusionado entre la PGJE y la SSPE parece tener un mejora.
En su segunda rueda de prensa que mensualmente está llevando a cabo el abogado tijuanense Guillermo “Titi” Ruiz ha dejado de manifestó la responsabilidad que cae en cada uno de sus colaboradores que sin temor de señalarlo públicamente ante los medios de comunicación no podrán equivocarse, no existirá curva de aprendizaje para el tema de investigación dijo el Fiscal.
La reducción en lo delitos de alto impacto como Homicidios en un 20% ha sido un trabajo discreto y estratégico que en mancuerna lo han estado desarrollando el comisionado Carlos Flores y su fiscal central Hiram Sánchez quienes han tomado el control de la dos corporaciones que existían e integrarlas en la Guardia Estatal de Seguridad e Investigación.
Esta estrategia de inteligencia e investigación ha permitido hasta este momento reducir en un 20% los homicidios, mientras que en lo que va de este mes de diciembre, la estadística muestra un decremento del 27%, y en estos dos meses se han incrementado en un 233% las órdenes de cateo además de la cumplimentación de órdenes de aprehensión en un 57% por arriba de lo que anteriormente se realizaba.
Sin embargo el abogado Guillermo Ruiz Hernández ha solicitado redoblar esfuerzos y viene incorporando perfiles de personas con experiencia y trayectoria en esta sinergia que le ha dado a la fiscalía autónoma que deberá dar resultados a los bajacalifornianos.
Analistas en seguridad y justicia comentaron que la estrategia no acaba ahí, se debe fortalecer la estrategia jurídica y buscar con los fiscales regionales la manera de que los autores de delitos queden en prisión preventiva y se incrementen las sentencias y judicializaciones ante el grave rezago que la administración anterior tuvo y que mágicamente en tan solo dos meses tomó velocidad e impulso en la sinergia del Fiscal “Titi “Ruiz.
También afirman que la estrategia de la ahora fiscalía que encabeza Guillermo Ruiz Hernandez debe basarse en el fortalecimiento de la investigación científica a través de los servicios periciales y forenses además del uso de tecnología y equipamiento para la generación de inteligencia policial y robustecer las carpetas de investigación por lo que los equipos de técnicos deben ser personas con amplia experiencia y caer en el riesgo de llegar aprender y con ello alentar la maquinaria.
Un ejemplo de lo que se pretende es la instalación de veinticinco puntos de control y verificación digital de vehículos vinculados con delitos lo cual permitirá evitar retenes.
Un gran reto tiene la fiscalía porque hoy conoce la causa y efecto del delito, puede generar trajes a la medida para prevenir los delitos y la violencia, conocer las formas y es generadora de una política Criminal por ello, no debe haber curva de aprendizaje ni culpas solo resultados.
Los bajacalifornianos requieren de mejores resultados y el reto es para la Fiscalía y todas las corporaciones policíacas de los tres ordenes de gobierno, no será culpa de partidos políticos , el éxito o fracaso será responsabilidad de la autoridad y los ciudadanos