Esta tarde de domingo se registró una balacera en el domicilio del Cardenal Norberto Rivera Carrera, localizado en la colonia Florida, donde un elemento de la policía auxiliar murió.

De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública, se presume que fue un intento de robo en el que participaron tres personas.

Según las primeras versiones, los agresores llegaron a preguntar por el ex Arzobispo y dejaron un sobre color amarillo, después se retiraron y minutos después regresaron en motocicletas y dispararon contra el domicilio ubicado en el número 110 de la calle Camelia, en la colonia Florida de la alcaldía de Álvaro Obregón.

El reporte de la Policía Capitalina detalla que el incidente se registró poco después de las 15:00 horas, en el lugar se encontraron 10 casquillos calibre 9 milímetros, los agresores según testigos, escaparon en dos motocicletas y en una camioneta color verde.

Elementos de la SSP montaron un operativo de búsqueda para dar con los responsables sin que hasta el momento se tenga resultado, al tiempo que revisan las cámaras de vigilancia del sector. 

Luego de que fuera dado de alta de un hospital en Naucalpan, Estado de México, uno de los presuntos responsables del asesinato de un escolta del cardenal Norberto Rivera fue trasladado al Reclusorio Preventivo Varonil Sur donde quedará a disposición de un Juez de Control.

La procuraduría capitalina informó que se cumplimentó una orden de aprehensión contra el hombre de 33 años identificado como Pavel, quien está relacionado con el ataque a la casa de Norberto Rivera del pasado 21 de octubre.

Trabajos Periciales, así como labores de campo y gabinete realizados por la Policía de Investigación permitieron ubicar al inculpado, quien fue plenamente identificado por un testigo como uno de los probables partícipes del homicidio en la casa del cardenal ubicada en la colonia Florida, alcaldía Álvaro Obregón.

De las investigaciones realizadas por el personal ministerial, se estableció que desde 2012, el inculpado cuenta con antecedentes penales en estado de Guerrero, por el delito de encubrimiento por receptación, tras ser detenido con un automóvil con reporte de robo con violencia.

En las grabaciones que captaron la balacera se captó que Pavel N fue el último de los tres agresores en huir de la casa del cardenal por las heridas sufridas durante el tiroteo. Después de gatear sobre la banqueta subió a un vehículo cuya ruta fue captada por las cámaras del C5. 

Horas después las autoridades averiguaron que el hombre llegó en compañía de otro, y por propio pie al hospital de Naucalpan donde fue atendido por heridas de bala.

En la Catedral Metropolitana, Jorge Estrada Solórzano, obispo auxiliar de México pidió a los católicos reunidos en el recinto orar por el arzobispo emérito Norberto Rivera Carrera quien fue víctima de un atentado el domingo pasado y por el policía bancario Javier Hernández quien murió en el cumplimiento de su labor.

"Pidamos por el cardenal Norberto Rivera quien la semana pasada fue víctima de un ataque en su casa, pidamos que el señor lo cuide y proteja a fin de que siga anunciando la palabra de Dios alrededor del mundo, oremos también por Javier Hernández, quien ofrendó su vida por defender al señor cardenal, para que su sacrificio sea tomado en el cielo y goce del descanso eterno".

A nombre del cardenal Carlos Aguiar Retes, el obispo auxiliar elevó una súplica por los pobres, por quienes sufren y por aquellos que están solos, en especial por los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos, "recemos para que bajo la intercesión de San Judas Tadeo sientan la proximidad de sus hermanos y sigan su camino con la esperanza de una mejor calidad de vida".

Se pidió por los encargados del poder civil, economistas, empresarios e industriales "para que sostenidos por el deseo de justicia busquen estrategias y soluciones que promuevan el bien de cada persona" y por Perú, "para que a través de la interacción pueda encontrar la reconciliación, justicia y paz entre sus habitantes".

Los tres presuntos implicados en la balacera en la casa del cardenal Norberto Rivera formaron parte de una banda delictiva que operaba en la zona de Lomas de Chapultepec, dedicados principalmente al robo y robo con violencia, indicó el jefe de Gobierno, José Ramón Amieva.

"Voy a tratar de ser muy cuidadoso, porque estamos en una etapa de investigación, pero podríamos decir que ya sabemos a lo que se dedican y sabemos los sitios de ubicación, dónde podrían estar y vamos por estas personas. Pertenecen a un grupo delictivo, son de una banda que, al parecer, en su momento, fue desarticulada, se reagruparon y que continuaron delinquiendo", detalló.

José Ramón Amieva precisó que los presuntos agresores, aunque cuentan con antecedentes, por el momento no se ha ubicado que estuvieran sujetos a un proceso penal o que estaban cumplimiento alguna sentencia.

Señaló que hasta el momento uno de los escoltas del cardenal ya presentó su declaración en calidad de testigo. Además, hizo un llamado para que se presente la denuncia correspondiente.

"Para nosotros es muy importante que se realice la denuncia, vamos a acercar todas las condiciones para que se pueda realizar, porque la denuncia nos permite a nosotros incorporar mayores elementos jurídicos", conminó.

Por esta balacera, registrada el domingo en la casa de Norberto Rivera, ubicada en la colonia Florida, en la alcaldía de Álvaro Obregón, el gobierno capitalino cuenta con dos retratos hablados de los supuestos implicados y uno más en calidad de detenido en el Hospital de Lomas Verdes.

La Iglesia católica mexicana calificó hoy de "calumnias" las acusaciones de encubrir casos de pederastia de clérigos, y defendió los 22 años del cardenal Norberto Rivera como arzobispo primado de México.

"Un tema comenzó a llenar de sombras su desempeño episcopal a partir de una calumnia incesantemente repetida, por distintos personajes, y reproducida una y otra vez en los medios de comunicación: la injusta acusación de encubrir delitos de algunos clérigos", indicó la Arquidiócesis de México.

En un editorial publicado en el semanario Desde la Fe, la Iglesia afirmó que se vinculó de "manera imprecisa" a uno de los casos "más deplorables de la Iglesia católica contemporánea", en referencia a los casos de abusos sexuales de menores atribuidos a Marcial Maciel (1920-2008) y otros miembros de los Legionarios de Cristo.

"La calumnia se ha convertido casi en un 'modus vivendi' de algunos periodistas y otros cuestionables personajes", afirmó la iglesia.

"Mientras tanto, la Corte de Justicia de los Ángeles, primero, de California, después y, finalmente, la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos, declararon improcedente el conjunto de falsas acusaciones contra el cardenal Rivera", añadió el texto.

En el artículo se defiende la figura de Rivera, que dejará el cargo el próximo 5 de febrero y será sustituido por Carlos Aguiar Retes como arzobispo primado de México.

Además del caso de Marcial Maciel, el cardenal ha enfrentado varias acusaciones, e incluso denuncias, por una presunta complicidad en casos de pederastia como el del religioso Nicolás Aguilar Rivera, acusado de abusar sexualmente de más de un centenar de menores.

El 2 de junio del 2017, el exsacerdote Alberto Athié presentó una denuncia contra Rivera ante la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía) por el presunto encubrimiento de casos de curas pederastas.

 Al presidir la homilía dominical, el cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo primado de México, pidió orar por las autoridades a nivel ejecutivo, legislativo y judicial, federales y locales.

El cardenal confió que "por medio del don de consejo puedan oír la voz de Dios en las situaciones difíciles de la vida, encuentren la sabia decisión, y pronuncien la palabra justa para obrar rectamente en sus actos de gobierno", señaló.

También se pidió por los empresarios y quiénes tienen poder económico para que por medio de su don, perfeccionen el ejercicio de la caridad en favor de sus empleados.

Durante su discurso, el prelado indicó que "los seres humanos necesitamos la paz del resucitado para ser renovados continuamente, enfatizó en la necesidad de perdonar y ser perdonados".

Señaló que en cada familia se debe invocar al espíritu de Dios, para permanecer en unidad y armonía. "Cada uno en la familia es distinto y vemos cómo en algunas ocasiones es el adolescente el que huye, otras veces el papá, a veces la mamá dice que ya no puede más; por ello, la familia necesita invocar continuamente el espíritu de Dios, solo él hace que pueda permanecer en la unidad", puntualizó Rivera.