Migrantes estudian posibilidades: México, EEUU, Canadá o la vuelta a su país
La caravana migrante que se instaló desde hace 10 días en la ciudad de Tijuana pasó de contar con opciones limitadas a explorar la posibilidad para reiniciar su vida en México, Estados Unidos o Canadá.
Los centroamericanos, que hoy se siguen reagrupando en esta ciudad fronteriza para formar nuevamente el contingente de 5.000 personas que entró a México el 19 de octubre, cumplieron 10 días en Tijuana, tiempo que les han servido para analizar la situación que enfrentan.
El despliegue de las fuerzas de seguridad en la frontera del lado estadounidense, con más de 5.000 agentes; los complicados trámites, sobre todo en lo relacionado con el tiempo de espera para resolver su situación, y la negativa del presidente Donald Trump a aceptarlos generó desesperanza entre los centroamericanos.
Ante ese complejo escenario, los centroamericanos sopesan varias alternativas sobre su futuro.
Unos han decido regresar a su país, aunque no se han movido de Tijuana; otros ya tomaron la decisión de rehacer su vida en México; otros insistirán en llegar a Estados Unidos porque es el país donde tienen familia y esta semana a algunos se les planteó la posibilidad de que puedan, a mediano plazo, llegar a Canadá.
La italiana Francesca Fontanini, portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) para las Américas, cree que la mayoría de los integrantes de la caravana que entró a México hace un mes intentará pedir asilo político en Estados Unidos.
"Habrá que informarles que los tiempos son bastantes largos para obtener una respuesta y sobre la posibilidad de conseguir el asilo", apuntó a Efe.
Dijo que hay que esperar para ver qué dinámica se desarrolla durante los próximos días en Tijuana pero ante el despliegue de seguridad observado en la frontera "muchos pedirán refugio en México", para regularizar su situación migratoria y así tener la opción de buscar un trabajo.
Por otra parte, una minoría "probablemente pedirán ser devueltos a sus países", algo que ha pasado mucho con los que migrantes que han llegado en los últimos días en la Ciudad de México.
Tomás, un hondureño de 24 años originario de La Ceiba y que viaja con su hermana y un sobrino, dijo a Efe que por ahora los mejor es "esperar a que se calmen las aguas" e intentar cruzar a Estados Unidos después "si es que se puede pasar o esperar el tiempo que sea necesario en Tijuana".
"Ha sido un viaje muy difícil, estábamos conscientes de que no iba ser sencillo (...) no he pensado quedarme en México pero si continúa la cosa así tal vez decida quedarme", añadió.
La opción de que algunos pueden ir Canadá fue planteada el lunes por el arzobispo Leonardo Marín Saavedra, de la Iglesia Anglicana Latinoamericana, quien dijo que tiene un proyecto que dará a conocer al Gobierno canadiense para que algunos centroamericanos sean aceptados.
También el lunes, en una acalorada asamblea, un representante de la caravana pidió paciencia a sus compañeros que esperan al resto de migrantes que se trasladan desde la ciudad de Mexicali
Los llamó ser cautos ante futuras decisiones que puedan tomar, como las de ir a los cruces fronterizos e intentar forzar su paso, situación que, dijo, solo les va a traer la deportación a sus países.
En estos puertos fronterizos como las garitas de San Ysidro y la de Otay las medidas de seguridad han aumentado con el despliegue de barricadas por parte de agentes estadounidenses que están a la espera de una entrada masiva por parte de los centroamericanos.
La caravana migrante se ha visto presionada y vive sus días en tensión en el albergue de la popular zona norte por la decenas de detenciones que han sufrido sus compañeros en los últimos días por distintas faltas a ley lo que los ha colocado en situación de ser deportados.
La organización Pueblo Sin Fronteras, que apoya a la movilización, informó que las autoridades de Tijuana están estudiando dónde hospedar a los migrantes que continúan llegando desde Mexicali, dado que la capacidad del albergue que ocupan actualmente esta rebasada.