Negocios de la Zona Centro, se ven afectados por la crisis migratoria
Baja Marina es una limpiaduría y planchaduría con más de 70 años de servicio, se encuentra a unos cuantos metros de la Unidad Deportiva Benito Juárez, donde hace dos semanas se refugiaban hasta 6 mil integrantes de la caravana migrante, pero después de ser clausurado por las autoridades municipales, cientos de personas siguen acampando a la intemperie de la avenida 5 Mayo; por lo que pequeños negocios a su alrededor como esta tienda de servicio, han resultado afectados considerablemente.
El comerciante de la tercera generación de Baja Marina, Hiram Humbert, comentó que cada verano se preparan para la temporada fuerte, que son los meses de invierno a partir de diciembre cuando el trabajo incrementa, sin embargo, ante la llegada y establecimiento de los migrantes centroamericanos en la Zona Norte, ha generado baja afluencia de clientes, por lo que sus ventas se redujeron a un 0%.
"Yo soy una persona muy honrada con mis trabajadores, pero ellos también salieron afectados, cada caño les pago su aguinaldo el 10 de diciembre pero este año les dije que me esperaran hasta el 22 de diciembre".
El dueño del negocio, sin tener la certeza de que les podrá pagar aguinaldo a sus 13 trabajadores quienes tienen que mantener a sus familias, aseguró estar consciente de la situación vulnerable por la que han pasado los migrantes, sin embargo, también comentó que la crisis migratoria ha pasado a afectar la rutina de los residentes de Zona Centro.
"Para esta Navidad en mi casa no habrá nada, no habrán regalos ni cena... Esto sin duda nos ha cambiado nuestro ritmo de vida, yo tengo diabetes e iba a hacer ejercicio a la Unidad Deportiva. Los niños y jóvenes, también dejaron de hacer deporte, incluso los niños de la primaria dejaron de tener clases".
Incluso, señaló ser testigo de cómo los integrantes de la caravana migrante hacen lo quieren, al faltarle al respeto a los elementos de la policía municipal de Tijuana.