Huachicoleo se combate educando a la población: Oxford Analytica
El cierre de los ductos de Pemex es una estrategia insostenible ante el saqueo de combustible que experimenta México, sólo educando a la población a no comprar robado y ejerciendo tolerancia cero ante el huachicoleo se podrá poner freno a un crimen que va en ascenso desde 2017, sostiene la firma Oxford Analytica.
La consultora británica sostiene en un documento al que ha tenido acceso EL UNIVERSAL que "el cierre de ductos no es una solución sostenible ante el robo de combustible", dadas las perspectivas de que generará importantes daños económicos y frustración de la población ante la escasez.
"Por lo tanto, AMLO tiene que buscar una estrategia de reducción [del robo] a largo plazo que implique seguridad física, medidas anticorrupción y esfuerzos para cambiar las percepciones de la población hacia el combustible del mercado negro".
Señala que el saqueo energético ha aumentado dramáticamente en los últimos años. Estima el costo de la sustracción ilegal de combustible en 7.4 mil millones de dólares desde 2016.
Oxford Analytica es una consultora de estudios geopolíticos, con oficinas en Oxford, Nueva York y París y especializada en identificar oportunidades de negocio, construcción marcas comerciales y anticipar impactos ante riesgos potenciales. Entre sus clientes hay gobiernos, bancos, aseguradoras y corporaciones multinacionales activas en sectores como el energético, la minería y el transporte.
La organización había alertado sobre el atraco masivo de gasolina en México desde el año pasado en otro reporte. El documento titulado "las elecciones retrasará los esfuerzos de México contra el robo de combustible", advirtió en su momento que el saqueo se había disparado y era abierto ante la limitada acción gubernamental.
Citando datos de Pemex, indicó que en 2017 se registraron 10 mil 363 incidentes delictivos de sustracción ilegal, muy por encima de 2016 cuando se registraron 6 mil 873 casos, y de los tres años previos, cuando se contabilizaron mil 635. El robo en 2017 fue de alrededor de 1.47 millones de galones, equivalente a 1% y 2% del combustible total transportado y a 1.1 mil millones de dólares.
El informe también denunció que era una actividad que contaba con la complicidad de una sociedad enfadada por el incremento de los costos de los combustibles a partir de la liberalización en 2017; el precio del gas líquido aumentó 40% y la gasolina entre 17 y 25%. "El aumento del precio del combustible es percibido como injusto por una parte importante de la sociedad mexicana, lo cual resulta en un apoyo al mercado negro de combustible".
El texto igualmente dejó constancia de la participación de los cárteles de la droga. "Los principales cárteles de México están involucrados en el comercio, concentrándose en vender a granel a empresas y estaciones de servicio. En gran parte, son estos grupos de la delincuencia organizada los que están detrás de la escalada de corrupción, amenazas y violencia contra los empleados de Pemex a quienes buscan extraer información comercial valiosa".
Así como del incremento de la violencia en entidades con instalaciones energéticas relevantes, por ejemplo Salamanca, en donde se ubica una de las refinerías del país, registró mil 96 asesinatos en 2017, 70% más que en 2013. "Aunque la violenta competencia por el control del suministro de energía no fue la única razón de este aumento, sí fue un factor que contribuyó".
El documento señaló que el saqueo, la vulnerabilidad de la infraestructura y la pasividad gubernamental, afectaría la producción de un sector que adolece de inversión a largo plazo, aumentará el riesgo de incendios y accidentes industriales, al tiempo que podría inhibir la participación de los inversionistas internacionales.