Urge atender migraciones masivas, afirma Derechos Humanos
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) convocó a los Ombudsperson del mundo a ser más creativos y proactivos ante las nuevas formas adoptadas por el fenómeno de la movilidad humana que se refleja en éxodos masivos de personas como consecuencia de la pobreza y falta de oportunidades, así como por conflictos políticos, violencia en distintos países y desplazamiento por desastres naturales, por lo cual los urgió a fortalecer su labor de protección y defensa de los derechos fundamentales, especialmente de las personas en situación de vulnerabilidad, como niñas, niños, adolescentes y mujeres.
En ello coincidieron el Ombudsperson nacional, Luis Raúl González Pérez, y el Presidente del Instituto Internacional del Ombudsman (IIO), Peter Tyndall, quienes pusieron de manifiesto que la atención del fenómeno migratorio constituye un reto para que los gobiernos y las instituciones de defensa y protección de los derechos humanos, ya que se requiere la participación de todos los sectores involucrados, debido a que se trata de un problema de carácter regional y global que no puede resolverse de manera unilateral.
En los trabajos de este día de la Reunión de la Junta Directiva del IIO, González Pérez destacó que nuestro país enfrenta un desafío adicional en la materia por la decisión unilateral del Gobierno de Estados Unidos de retornar a territorio a los centroamericanos solicitantes de refugio en tanto se resuelve su petición, ante lo que se requiere saber cuál será el futuro de esas personas en el caso de que su petición sea negada. No obstante, refirió que ese problema se atiende de manera humanitaria por el Gobierno mexicano.
Al respecto, Peter Tyndall manifestó que las 199 instituciones defensoras de derechos humanos que integran el IIO deben diseñar e implementar normas de carácter internacional para enfrentar las amenazas en su desempeño, para preservar su independencia y establecer directrices que permitan mejorar su labor, en tanto que sus homólogos subrayaron la importancia de que los defensores de derechos humanos se abstengan de asumir posiciones políticas que polarizan a la sociedad y los alejan de su labor como observadores y protectores de los derechos y la dignidad de las personas, por lo cual urge revisar los mecanismos de trabajo y conducta del organismo internacional.