“La Lobera”, es uno de los tantos atractivos turísticos de nuestro estado, ubicado a 45 minutos del sur de San Quintín, en el kilómetro 47.5 de la carretera Transpeninsular.
Se trata de un cráter natural entre arrecifes y playas donde se refugian focas, lobos marinos, aves y otras especies.
Es visitado por turistas locales, nacionales y extranjeros, por lo que las autoridades de Turismo del Estado invitan a la población a tomar precauciones al trasladarse a dicho lugar.
Para visitar este atractivo es necesario llevar vehículos altos y de doble tracción en óptimas condiciones, así como consultar el clima antes de asistir, ya que son 3.8 kilómetros de camino en terracería hasta llegar al destino.
Se recomienda verificar las condiciones de las unidades con las que se trasladan, pues las extremas condiciones climáticas y el flujo de vehículos que transitan diariamente, han provocado desgastes en el camino.
Aún con lo anterior, es posible transitar libremente tomando las debidas precauciones y manejando a una velocidad moderada, puesto que sólo hay una vía que conduce a La Lobera
También se pide conservar el hábitat, evitando arrojar basura, respetar a los mamíferos y no perturbarlos.
A partir del mes de febrero se puede apreciar mayor cantidad de focas y lobos marinos, siendo la época en donde las focas tienen a sus crías; al ser primavera, tales especies marinas ocupan el lugar para descansar y amamantar, aunque el avistamiento es posible todo el año.
Según cifras de la Secretaría de Turismo en el Estado (Secture) durante 2018 la localidad recibió más de 410 mil visitantes, motivados principalmente por el tema de aventura y la gastronomía.