Pese al frío, migrantes se niegan a ocupar albergues en Tamaulipas
Pese a las adversas condiciones climatológicas, los migrantes que se encuentran en el Puente Nuevo Internacional se niegan a ser trasladados a los albergues temporales que se han activado ante la llegada del frente frío número 12.
En esta frontera, el termómetro descendió considerablemente hasta llegar a cuatro grados centígrados con sensación térmica de menos 1.
Desde la noche del lunes, elementos de Protección Civil y Migración en Matamoros acudieron al acceso al Puente Internacional para convencer a los migrantes de resguardarse en los albergues pues su vida corría peligro.
Sin embargo, declinaron la invitación pues aseguran no quieren perder la oportunidad de ser recibidos en Estados Unidos para solicitar una visa humanitaria o asilo político.
Los migrantes se instalaron en casas de campaña en espera de cruzar la línea divisoria entre México y Estados Unidos aunque, de acuerdo al orden de ingreso que ha dado la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, tendrán que permanecer durante varios días en esta frontera
Las condiciones en las que se encuentran son paupérrimas y lo que las autoridades buscan es que sobre todo los niños puedan mantenerse lejos del frío y en un lugar donde puedan recibir alimento caliente y una cama donde pasar la noche.
Actualmente, aproximadamente dos mil migrantes se encuentran apostados en el Puente Nuevo Internacional. Algunos de ellos han tenido que pasar los días en casas de campaña hechas con plástico que han sido colocadas a en el bordo que resguarda las márgenes del río Bravo.
El alcalde de Matamoros, Mario López, informó que han acudido en dos ocasiones para convencer a los migrantes de aceptar la ayuda y poner a salvo a menores de edad y adultos mayores.
"No se quieren mover, la segunda ocasión hizo presencia el DIF para de alguna manera proteger a los niños ya que es una facultad que tiene la procuradora sin embargo no quieren. La idea era mover a los niños junto con las familias, no queremos separarlos".
Dijo que actualmente están buscando bodegas grandes para habilitarlas como albergues, sin costo para el municipio.
"Ahorita quienes están apoyando con los gastos es el organismo internacional de Derechos Humanos que depende de la ONU, ellos traen recurso. Acabo de comunicarme a la Ciudad de México para solicitar recurso para rentar una bodega o un edificio donde podamos tener a todas estas personas, estoy a la espera de que me digan si hay o no, partida presupuestal para esto".
El municipio cuenta con el Auditorio Deportivo de Matamoros, la Alberca Chávez, el Auditorio Mundo Nuevo y las instalaciones de Nuestra Señora de San Juan para albergar a estas familias que pese a las condiciones adversas del clima se niegan a dejar las casas de campaña.
Indigentes
En Reynosa, son los indigentes quienes no aceptan ser trasladados a uno de los tres albergues que se han activado en la ciudad, mientras que los migrantes se encuentran en la Casa del Migrante y en la Casa Senda de Vida.
Actualmente en esta frontera se cuenta con 15 personas albergadas en la Casa del Indigente, aunque al menos 50 han declinado ser resguardados de las bajas temperaturas.
En esta ciudad, el termómetro marcó cuatro grados por la madrugada y aproximadamente a las 11:00 horas, la temperatura bajó hasta los dos grados centígrados.
Federico Pérez, titular de Protección Civil, informó que se implementó el Operativo Indigente, ya que existen poco más de cien personas en condición de calle tan sólo en la zona centro de la ciudad.
Dijo que aún y cuando las bajas temperaturas podrían afectar seriamente su salud, los indigentes no desean ser trasladados a los albergues principalmente porque no desean acatar las reglas que se tienen en los mismos.
"No podemos forzarlos a ser trasladados, por lo que les estamos entregando alimento caliente y cobijas para que puedan pasar estos días ya que de acuerdo al Servicio Meteorológico Nacional, la temperatura se mantendrá en cuatro y cinco grados centígrados, lo que puede poner en riesgo su vida".
Manifestó que seguirán realizando recorridos por las diversas colonias de la ciudad a fin de detectar a personas en condición de calle, así como a familias que habitan zonas vulnerables y cuyas viviendas están construidas con lámina y cartón.