Una adolescente que permanecía acostada en su cama en el municipio de Allende, Nuevo León, fue lesionada por una bala perdida que perforó el techo de lámina de su vivienda, durante las celebraciones de año nuevo, ya que algunas personas habían celebrado el reinicio del calendario con disparos al aire.

Debido a que la bala perdió fuerza al perforar el techo de lámina, la menor no requirió hospitalización, pero fue atendida en el centro de salud municipal, por el impacto que recibió en la parte posterior del hombro derecho, mientras descansaba en un domicilio de la colonia Valle los Duraznos en el referido municipio, que se localiza en la región citrícola del estado, unos 60 kilómetros al sur de esta ciudad.

Familiares de la menor publicaron en redes sociales sobre el incidente, que fue condenado por otros usuarios, aunque también hubo quien puso en duda la veracidad del hecho.

"Gente sin conciencia, le cayó una bala a mi sobrina, de buenas y no pasó a mayores", publicó una mujer, y agregó que el proyectil atravesó la lámina de la vivienda, mientras la menor estaba acostada. "Qué necesidad de tirar balazos al aire", reprochó.

La mujer etiquetó la historia a varios contactos y pidió divulgar el hecho para hacerlo viral, pues dijo, ya "ni adentro de la casa podemos estar seguros".

Serán más de 300 elementos de la Policía Municipal de Tijuana quienes formen parte del operativo de Año Nuevo, mismo que se desplegará en puntos estratégicos de la ciudad, informó el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana José Fernando Sánchez. 

“Estaremos desplegando más de 300 policías en diversos puntos para tener control de los festejos”, indicó el funcionario municipal. 

El objetivo no solo es lograr evitar accidentes de tránsito consecuencia de personas en estado de ebriedad también reducir los delitos. 

Y si usted es de los que gustan de tronar cuetes para celebrar el cierre del año, las autoridades exhortan evitar este tipo de prácticas. 

“Tiene que ver con la prevención hay niños que no están bajo supervisión y a veces se puede generar un incendio”, planteó. 

La Policía Municipal, también alertó a no tirar disparos al aire.

“Esos proyectiles van a caer y caen con una fuerza que pueden matar a una persona”, concluyó.

La mala suerte combinada con la imprudencia, provocaron que Sandra Jiménez, de 23 años, terminara lesionada por una bala perdida cuando caminaba junto a una peregrinación rumbo a la iglesia de San Hipólito para celebrar a San Judas Tadeo.

Según lo dicho por la joven, ella iba junto a la congregación, cantando y echando porras a su Santo por el cruce de la calle Barreteros y la calle Cerrajería, en la colonia Azteca, perímetro de la alcaldía Venustiano Carranza, cuando de repente sintió un golpe en el rostro, a la altura de la quijada, y en su hombro.

--Momento de confusión

En un principio, Sandra pensó que los impactos en su cuerpo habrían sido causados por los juegos pirotécnicos que el grupo de feligreses lanzaban en su trayecto hacia dicho templo, ubicado en el centro de la ciudad.

Sin embargo, sus acompañantes, al ver que sangraba, la revisaron y notaron que se trataba de una bala, la cual se había alojado debajo de su clavícula, de donde salía un hilo de sangre, por lo que de inmediato llamaron a los servicios de emergencia.

Minutos después, la joven fue trasladada a bordo de una ambulancia del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) al hospital General Rubén Leñero, donde más tarde los médicos reportaron su estado de salud como fuera de peligro.

A pesar de lo ocurrido, el contingente de creyentes continuó su camino hacia la parroquia de San Judas Tadeo, donde pasarían celebrando toda la noche.

Un niño de seis años que se encontraba acostado en su cama, en una vivienda de la colonia Acuitlapilco, resultó herido en la cabeza al recibir una bala perdida; su estado de salud es reportado grave, informó el gobierno local.

De acuerdo al reporte de la Policía Municipal, los hechos ocurrieron antes de las 11 de la mañana de este domingo, en un inmueble de techo de lámina.

Según los testimonios proporcionados por la familia a oficiales que llegaron al lugar, el pequeño Dilan dormía cuando la bala lo lesionó a la altura de la sien.

En una ambulancia fue trasladado inicialmente al Hospital General de Chimalhuacán, pero al parecer no contaban con el equipo necesario para brindarle atención, por lo que tuvo que ser llevado al Hospital de Alta Especialidad de Ixtapaluca.

El ayuntamiento informó que el estado de salud del menor es grave debido a que el impacto lo recibió en la cabeza.

Hasta el momento se desconoce de dónde provino la bala porque no había alguna festividad en la zona, ni tampoco se escucharon detonaciones por alguna gresca en esa comunidad, por lo que tampoco hay detenidos.