Levantar la voz y no quedarse calladas ante un acto violento es el primer paso
"Levantar la voz y no quedarse calladas ante un acto violento es el primer paso para erradicar los machismos". En medio de la ola de violencia por la que atraviesa nuestro país, Claudia de la Garza y Eréndira Derbez escriben sobre el machismo cotidiano, que por años se ha minimizado, en ocasiones por costumbre y en otras por miedo.
"No son micromachismos" es un libro que abarca las acciones que se consideran normales, pero que en realidad pueden desatar violencia en el futuro. Es un ejemplar que motiva la reeducación de familias, de hombres, así como de mujeres.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la coautora, Claudia de la Garza, comenta que levantar la voz ante un acto violento, así sea un chiste o un piropo, es esencial para comenzar a erradicar la violencia y posteriormente pasar a la reeducación: "La educación es fundamental para erradicar la violencia y los machismos, pero no tiene que ser la misma que hemos recibido, en la que las niñas tienen que cuidarse para que no les hagan daño".
La escritora afirmó que durante años los movimientos feministas han destacado los problemas de violencia, no sólo física, sino también laboral y sicológica por los que atraviesan las mujeres, lo cual ha abonado para que se convoque a un paro de actividades mañana.
"No son micromachismos" fue escrito para que no sólo las mujeres jóvenes y mayores, además de hombres, "tengan una herramienta que los ayude a enfrentar, rechazar y cambiar estas acciones [violentas] que creemos cotidianas".
Un elemento extra del libro es que sirve no sólo para dar herramientas, ya que en sus páginas se pueden encontrar ilustraciones que le dan más potencia al texto, resumen, ejemplifican y encaran la situación presentada en cada capítulo.