El fallecimiento de dos gemelitos ha consternado a los ciudadanos del sur de Tamaulipas, debido a que su joven madre presuntamente no fue atendida con prontitud en el hospital Carlos Canseco, de Tampico, y tuvo que iniciar el doble parto en un sanitario del nosocomio.

El joven José Vladimir Escobedo Jiménez relató a medios locales que debido a su esposa María Inés Enríquez Cruz sintió los dolores de parto, salieron temprano desde la colonia Primero de Mayo hacia el hospital Carlos Canseco, a donde llegaron a las 6:30 horas. Explicó que su esposa tenía 7 meses y una semana de un embarazo considerado de alto riesgo, el cual le habían diagnosticado antes en el Centro de Salud de Ciudad Madero, donde les dieron una hoja referenciada, con la cual podría ser atendida en el hospital más cercano.

"Nosotros tenemos una hoja referenciada ya que era un embarazo gemelar de alto riesgo y nos pidieron acudiéramos al hospital más cercano, cuando se presentara una urgencia", narró Escobedo. Ya en el nosocomio se presentaron algunas dificultades, porque en el área de Ginecología le dijeron que había cuatro pacientes por delante. El joven entregó la documentación que llevaba y un guardia le indicó que tenía que esperar afuera. Casi a las 8:00 horas le dieron permiso de ingresar a verla y se dio cuenta que aún no había sido atendida, "me dijo me duele mucho, no aguanto más, me duele".

Entonces su esposa le pidió acompañarla al baño, y fue ahí cuando nació el primero de los gemelos, aproximadamente a las 8:15 horas. José Vladimir comenzó a gritar pidiendo ayuda porque estaban naciendo el primero de sus gemelos y era embarazo de alto riesgo. Llegaron los médicos y le pidieron que esperara. Más tarde le avisaron que lamentablemente sus bebés habían fallecido, "pero no me dijeron cuál fue el motivo, no protesté nada, yo prefiero denunciar". Hasta la noche de este viernes las autoridades no han emitido información oficial sobre el fallecimiento de los dos gemelitos.

Bien dicen que a bordo de los taxis y de algún servicio de transporte suelen ocurrir las historias más inverosímiles y algunas de ellas trascienden más allá de la sola anécdota y se llegan a difundir debido a lo trascendental del hecho. Así ocurrió con una mujer que mientras se trasladaba en un taxi tuvo un parto repentino y dio a luz a su bebé a bordo de la unidad, sin embargo, el chofer de la misma le terminó cobrando una tarifa extra por haber "ensuciado" el vehículo.

Se trata de Farah Cacanindin, una joven británica de 26 años de edad quien tuvo un parto repentino mientras viajaba en un taxi camino al hospital, en donde tendría una revisión médica de rutina. Sin embargo, cuando se encontraba a solo unos minutos de llegar al hospital, entró en trabajo de parto y dio a luz justo en la unidad en la que se trasladaba. Afortunadamente su bebé nació bien, pero después de este acontecimiento las cosas comenzaron a ponerse complicadas.

El motivo es que días después que ocurriera el nacimiento de la pequeña Naia, hija de Farah, en el taxi, el conductor le hizo llegar a la joven una factura en la que le cobraba por los inconvenientes que debido a su parto había dejado en su auto. El costo "extra", aparte del servicio, fue de 90 libras esterlinas (alrededor de 2 mil pesos mexicanos), y que consistía en el cobro por la limpieza que se hizo del automóvil.

Historia de la joven que dio a luz en un taxi se volvió viral

La historia de Farah Cacanindin ocurrió en el Reino Unido y fue dada a conocer por el diario británico "The Sun", en donde la protagonista de la historia contó cómo ocurrió el nacimiento de su hija Naia mientras se trasladaba en el taxi con dirección al hospital, en donde tendría una revisión de rutina.

Según lo que Farah contó, se encontraba a tan solo cinco minutos de llegar cuando entró en trabajo de parto, momento en el que el conductor llamó al hospital Stoke Mandeville para solicitar ayuda, sin embargo, finalmente la joven tuvo a su bebé en el taxi. La feliz madre volvió a su hogar y a los pocos días contó que recibió una noticia que no esperaba.

De acuerdo con lo citado en el medio, la mujer recibió una factura de 90 libras esterlinas, más de 2 mil pesos mexicanos, como cobro por la limpieza que se le realizó al taxi después del parto. Esto más 30 libras correspondiente a la tarifa del viaje, esto es más de 600 pesos. Una vez que revisó la factura Farah se sorprendió debido a que no esperaba que le cobraran por este hecho.

En la entrevista para "The Sun" declaró que si bien comprendía que había quedado un desastre tras el nacimiento de su bebé, le pareció un descaro la cantidad que le estaba cobrando el taxista por este concepto: “Entiendo que hice un desastre, pero es un poco descarado haberme cobrado", declaró.

Farah también narró lo que pasó a bordo de la unidad aquel día: "Fue el parto más rápido de mi vida. Rompí fuente a los cinco minutos de viaje. El conductor me preguntó si quería que se detuviera, pero le dije que siguiera adelante porque creía que llegaría antes de que naciera”, narró. Además que aseguró no haber tenido ni tiempo para tener miedo:

“Fue surrealista. No tuve la oportunidad de tener miedo”, explicó. Una vez que su hija nació, Farah la envolvió en su chaqueta y enseguida fue trasladada al hospital: “Cuando llegamos al hospital, las comadronas nos esperaban y estaban conmocionadas. Fue surrealista. No tuve oportunidad de asustarme”, contó la joven madre. 

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En héroes se convirtieron los agentes municipales Reséndiz y Hernández, así como su jefe en turno, al auxiliar con éxito la labor de parto de una joven en vía pública, en Mexicali. 

Los hechos ocurrieron la tarde de este domingo en el fraccionamiento Paseos del Sol, en donde en el cruce de la calle Primera y avenida Río Lerma, María Guadalupe Ramírez Coronado terminó siendo apoyada por los oficiales al tener ya desprendida la fuente. 

Previamente, la madre de la mujer, María Elena Coronado Rojas, había sido abordada por lo policías al estar conduciendo en a exceso de velocidad. Fue ahí cuando solicitó ayuda para poder llegar al Hospital Materno Infantil de la capital del estado pues su hija se encontraba casi por dar a luz.

Los oficiales brindaron el apoyo pero fue en camino a la unidad de salud que la ahora madre no pudo contener y todos tuvieron que determinar la marcha para apoyar las maniobras. Afortunadamente el agente Reséndiz contaba con conocimiento en primeros auxilio y fue brindo el auxilio. 

Una ambulancia de Cruz Roja llegó posteriormente al lugar de los hechos para trasladar a María Guadalupe al Hospital Materno Infantil para terminar de brindarle los servicios médicos necesarios.

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Hace unos momentos sobre el Bulevar 2000, la Oficial Mora y el Oficial Ferrero auxiliaron en la labor de parto de una ciudadana originaria de Hidalgo, Pachuca. 

Esto permitió que al arribo de la Cruz Roja Tijuana pudiera darle mejor asistencia y ser ambas llevadas a las instalaciones para su mejor cuidado y valoración médica.

La madre y el bebé están en buen estado de salud.

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Cuando se dirigían al Hospital Materno Infantil, una mujer dio a luz a bordo de un taxi en el municipio de Monterrey, luego que en un Centro de Salud les negaran atención médica, informó la familia. 

La hermana señaló que tuvo que ayudarle para que naciera la bebé, en el interior del vehículo, en la avenida Julio A. Roca. 

"Yo le ayudé a sacar al bebé, se le reventó la fuente a mitad de camino, ya traía dolores, la llevamos al Centro de Salud en la Fomerrey 113 y no la quisieron atender", señaló. 

El papá de la bebé, Luis Fernando Aguilar, mencionó que no avisó a su trabajo que no iba a ir, por lo que esperaba que sus jefes estuvieran viendo el noticiero. 

"Ella es la tercera. Espero que me estén viendo en el trabajo porque no he avisado y espero me paguen la semana", dijo el hombre, quien trabaja como electricista. 

La madre señaló que aún no saben cómo la llamarán. 

Por su parte, el taxista dijo que nunca le había tocado atender una situación así, por lo que reconoció que se puso nervioso, pero afortunadamente el bebé nació bien. 

Paramédicos de la Cruz Roja arribaron al sitio para atender a la mujer y trasladarla junto a la bebé al hospital. 

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En Mexicali, los padres de un menor recién nacido acusaron que médicos le cortaron la oreja al bebé al practicarle una cesárea a su madre con las lámparas de tres teléfonos celulares, ya que el quirófano no tenía energía eléctrica. 

Los hechos quedaron grabados por los propios médicos de la Clínica Internacional de Especialidades de la capital del estado y fue relatado por los padres en una carta escrita en primera persona por su hijo Julián Adriel. 

“No debieron operar a mi mamá sin luz, no debieron cortarme mi orejita”, se lee al final del documento de una cuartilla. 

Sonia Martínez ingresó al hospital el pasado 6 de junio a las 11:00 horas y las 12:40 se fue la luz. Pese a estar anestesiada pero consciente, le suplicó al doctor responsable, David Santoyo, que no la sometida a la cesárea. 

“No me quiero operar así, sin luz, tengo mucho miedo. No me quiero morir”, dijo al médico. 

Sin embargo, el doctor David Santoyo le respondió que la operaría con apoyo de su teléfono móvil. Además salió del quirófano para decirle a su esposo que el quirófano estaba iluminado pues en el hospital tenían una subestación de energía eléctrica para abastecerse. 

Pero nunca lo dejaron pasar a ver el alumbramiento de su hijo Julián Adriel, como previamente lo habían acordado. El doctor se fue antes de concluir la cesárea y otro terminó suturando a Sonia, fue cuando le cortaron la oreja izquierda al bebé. 

En el video del alumbramiento se observa cómo el bebé llora y sangra al momento de ser acostado en una sábana. 

“Nunca me mostraron con mamá al nacer”, se describe en la carta. 

Luego un doctor salió para decirle al papá que no sabían quién, le había cortado la oreja al bebé. Al día siguiente, un médico argumentó a los padres que el niño nació con hemangioma y que por eso le reconstruyeron la oreja, situación por la cual se ahorraron 30 mil pesos. 

En la carta se indica que durante el embarazo de Sonia, siempre se hizo ultrasonidos, fue tratada por un ginecólogo y nunca le detectaron un problema a Julián Adriel. 

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