Los accidentes de tránsito cobraron la vida de 11 mil 155 niños menores de 14 años en la última década, lo que ubica a estos percances como el principal motivo de muerte infantil por causas violentas o accidentales en nuestro país tras superar las obstrucciones de vías respiratorias por objetos o los ahogamientos en ríos o piscinas. 

Cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que entre 2010 y 2019 las distracciones de los conductores derivaron en un promedio de tres muertes infantiles por día en los últimos 10 años, una media similar a las 4.2 defunciones diarias que ocasionaron los tumores malignos en sus diferentes variables. 

Las estadísticas revelan que el simple hecho de caminar en la calle o jugar en espacios públicos representa el mayor peligro para un infante en nuestro país, ya que 3 mil 703 niños perdieron la vida tras ser atropellados, lo que equivale a un tercio de las muertes totales por incidentes viales. 

De hecho, el riesgo de atropellamiento es más alto a temprana edad, pues mil 740 niños que perdieron la vida ante el impacto de un auto en movimiento tenían 4 años o menos; mientras que en el rango de 5 a 9 años se presentaron 994 defunciones y entre los adolescentes de 10 a 14 años se registraron 969 casos. 

En el informe Calles para la Vida. Trayectos seguros para los niños de América Latina y el Caribe, auspiciado por el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), señala que 60 por ciento de los niños que viven en Ciudad de México se dirigen a sus escuelas caminando y que la mayoría de ellos provienen de familias de ingresos bajos o medios. 

Además, el informe sostiene que “la relación entre la pobreza infantil y las lesiones por accidente de tránsito se observa claramente en los centros urbanos de México, donde los niños peatones son los más vulnerables (…) Aunque el padrón ha quedado claro, la respuesta política ha faltado”. 

En lo que respecta a los niños que murieron dentro de un vehículo, el Inegi señala que mil 665 viajaban en un automóvil, mientras que otros 441 infantes fallecieron en camionetas y otros 107 lo hicieron en autobuses de pasajeros. 

Un aspecto que destaca en las muertes infantiles es el uso de la motocicleta, ya que al menos 426 menores de 14 años perdieron la vida mientras utilizaban este medio de transporte ligero. 

Además, la mayoría de los casos se observan en Jalisco (39), Tabasco (33), Veracruz (30) y Chiapas (28); la mayoría son entidades con altos niveles de rezago social. 

Ante esta situación, la Unicef explica que “los niños pequeños rara vez utilizan cascos autorizados, en parte porque no existen cascos autorizados para niños menores de tres años, pero también porque no está regulado ni se impone” y que el uso de otras medidas como el uso de ropa de gran visibilidad en América Latina es muy bajo. 

Menores de 4 años, los más vulnerables 

En general, el grupo de niños y niñas más afectado por los accidentes de tránsito fue el que oscila entre los cero y 4 años, el cual registró 4 mil 380 defunciones a lo largo de la década; de hecho, datos oficiales revelan que al menos 765 de las víctimas mortales todavía no cumplía un año de vida. 

Con el fin de prevenir los decesos de los bebés durante un choque vehicular, la Fundación Mapfre señala en sus guías de transporte del recién nacido que las sillas de transporte infantil deben colocarse en el asiento de atrás, dando la espalda al conductor hasta que los niños cumplan cuatro años. 

Después de dicho periodo los infantes pueden dejar de usar los sistemas de retención infantil, pero deben seguir viajando en el asiento trasero hasta que cumplan 12 años o superen los 1.45 metros de altura, según se explica en el Reglamento de Tránsito de la Ciudad de México. 

A pesar del relajamiento en las medidas de seguridad conforme crecen los niños, los grupos de edad entre los 5 y 9 años reportaron un descenso significativo de las muertes por accidentes de tránsito con 2 mil 867 casos y entre los 10 y 14 años sumaron 3 mil 908 decesos. 

Casos por entidad 

Los registros del Inegi ubicaron al Estado de México y a Jalisco como las entidades federativas con más defunciones de niños menores de 14 años por accidentes automovilísticos, pues ambas demarcaciones concentran casi 20 por ciento de todas las muertes registradas en la década pasada. 

En la demarcación gobernada por Alfredo del Mazo, perdieron la vida mil 39 infantes por percances vehiculares, de los cuales 459 casos fueron peatones atropellados, 200 murieron dentro de un auto o camioneta particular, 22 por ir a bordo de una motocicleta o bicicleta y el resto está catalogado como “otros accidentes de transporte terrestre”. 

Por su parte, Jalisco tuvo un número de muertes infantiles similar al sumar mil 10 casos, entre ellos 433 fueron por atropellamiento, 73 fallecieron como ocupantes de un vehículo y otras 47 en percances con motonetas o bicicletas; el resto fue catalogado como “otros”. 

A las dos entidades mencionadas le siguen Guanajuato (775), Puebla (620), Chihuahua (569) y Sinaloa (511) como las zonas con mayor mortalidad infantil por accidentes viales. Entre estas seis entidades se concentra el 40 por ciento de todas las defunciones registradas en el país. 

Alrededor de las 12:20 horas, por reporte de C-4 que, en la carretera Ensenada a Tijuana en el kilometro 100, de la delegación del Sauzal, se había suscitado un incidente de tránsito con atropellamiento, motivo por el que se abocó la unidad. 

Al arribar oficiales confirmaron el llamado al visualizar a un masculino tendido sobre la carretera y con manchas pardo rojizas, por lo que se solicitó el apoyo de paramédicos quienes determinaron que no contaba con signos vitales. 

Peritos de tránsito determinaron que el peatón fue el responsable por cruzar la calle en un lugar no marcado para tal efecto e invadir intempestivamente la superficie de rodamiento, por lo que provocó ser atropellado por un vehículo tipo sedán, marca Nissan, color blanco.

Acto seguido acordonaron el área y se le dio aviso a la Fiscalía General del Estado a quienes les compete llevar a cabo la investigación correspondiente. se le invita a la ciudadanía a tomar sus precaucauciones ya que el trafico se encuentra lento.

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El uso de drogas y alcoholismo orilla a jóvenes a realizar acciones tan lamentables, tal y como ocurrió el fin de semana donde un joven falleció tras defender a una mujer en un bar de Tijuana, declaró la Gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda.

Agregó que desde el momento que se enteró del hecho, se comunicó con las autoridades correspondientes y se están realizando las investigaciones necesarias para esclarecer los hechos.

La mandataria aseguró que este caso no quedará impune y pide la confianza de los familiares del joven, identificado como Ismael Gálvez quién falleció tras ser atropellado a las afueras del bar Le Conteiner, la madrugada del domingo. 

"Vamos a exigirle a las autoridades las respuestas necesarias, me comuniqué de manera inmediata con el Fiscal General del Estado para darle seguimiento a las investigaciones al momento de enterarme de la terrible noticia", expresó Ávila Olmeda.

En el circuito oriente, en la Colonia Nueva Reforma en Ensenada, cerca de las 4 de la mañana, el C4 recibió el reporte de una persona posiblemente atropellada.

Al arribar oficiales confirmaron el reporte al visualizar una bicicleta tirada en el piso, y a un hombre tendido sobre la carpeta asfáltica, con manchas pardo rojizas que no respondía al llamado.

Solicitaron el apoyo de paramédicos quienes determinaron que carecía de signos vitales y fue declarado muerto en el lugar.

Oficiales de tránsito observaron evidencia de impacto entre un vehículo contra el conductor de la bicicleta; el vehículo responsable no se encontraba en el lugar. 

Derivado de ello dieron aviso a la Fiscalía General del Estado, para iniciar la investigación correspondiente.

Nigel Malt, de 44 años, asesinó a su propia hija de 19, Lauren, al atropellarla dos veces con su auto. Casi seis meses después, este lunes el hombre fue declarado culpable de asesinato, tras un veredicto unánime por parte del jurado, formado por seis hombres y seis mujeres, luego de un día de deliberaciones.

Lauren, la víctima, falleció el 23 de enero de este año frente a la puerta de su casa en King’s Lynn, en el condado de Norfolk (Inglaterra, Reino Unido), donde vivía con su madre y sus hermanos menores. Malt, su padre, estaba separado de su esposa y vivía en una dirección diferente.

Según los testigos, Nigel condujo hasta la vivienda de su hija y discutió con ella y su pareja en plena calle. El fiscal de la acusación, Andrew Jackson, alegó ante el jurado que Malt amenazó a la pareja con una palanca instantes previos a atropellar a su propia hija al “echar marcha atrás” el auto, según informó el canal de televisión británico Sky News. “Después de tirarla al suelo, arrojó su auto sobre ella a gran velocidad. Se detuvo, luego condujo el auto hacia adelante nuevamente sobre su cuerpo”, sostuvo.

Los vecinos alertaron a la policía de que vieron a una mujer atropellada por un auto alrededor de las 19.30 horas. Desde la Policía de Norfolk detallaron que se trata de un Mercedes C200 negro.

Posteriormente, Malt colocó a su hija en el asiento de copiloto del auto, mientras trató de evitar que los vecinos llegaran hasta el auto. Manejó hasta la tienda en la que trabaja su exesposa y luego llevó a la víctima al Hospital Queen Elizabeth en King’s Lynn, donde se declaró su fallecimiento.

Malt fue arrestado en el centro médico por sospecha de conducir bajo los efectos del alcohol, además del presunto asesinato.

La autopsia, que se conoció a través de un examen del Ministerio del Interior, registró que Lauren murió por lesiones traumáticas significativas en el pecho y en el abdomen. “Un examen posterior de su cuerpo reveló hematomas, laceraciones y lesiones por aplastamiento en la cabeza, el torso, los brazos y las piernas”, detalló la policía.

En todo momento, Malt alegó que se trató de un accidente y no de un asesinato. Durante el interrogatorio, dijo que que dio marcha atrás con su auto y, ante el impacto, sintió que golpeó un contenedor, por lo que condujo hacia delante para apartarse. Pero, tras salir del auto, encontró a su hija debajo.

La inspectora jefe Holly Evans, oficial superior a cargo de la investigación, apuntó tras el veredicto: “Lauren perdió la vida innecesariamente a manos de su padre, la misma persona que debería protegerla y mantenerla a salvo, en un ataque de rabia. Esperamos que Malt asuma la responsabilidad de sus actos. Nuestras condolencias para la familia y los amigos de Lauren”.

Además, el Tribunal hizo constar que en 2019 se abrió una investigación luego de que Malt amenazara a Lauren hasta casi golpearla en la pierna, pero en ese caso no se tomaron medidas al respecto.

El juicio por el asesinato de Lauren duró cuatro semanas hasta que el jurado arribó a este veredicto. El juez a cargo del caso, Anthony Bate, aplazó el proceso para la sentencia, que se dictará el 26 de agosto.

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Una mujer murió al intentar cruzar el corredor 2000 a la altura de la entrada de la colonia el Altiplano, y a unos metros de una estación gasolinera, el conductor que la impactó abandonó el lugar y en el acto tuvo un siniestro de tránsito con un camión de transporte de la empresa Settepi. 

Los hechos ocurrieron durante la noche del 13 de julio, arribando al sitio como primera respuesta personal de la policía municipal, en conjunto con paramédicos de Cruz Roja, quienes valoraron a la mujer y confirmaron que ya no contaba con vida. 

De acuerdo a testigos, la mujer optó por evitar el puente que se ubica a metros del lugar con la finalidad de ahorrar tiempo de cruce, no obstante fue alcanzada por el vehículo, mismo que impactó al camión de transporte que se encontraba estacionado, dejando solo en la escena la defensa y patrulla de su unidad. 

Posteriormente personal de la policía municipal de la sección de tránsito, y agentes de la Fiscalía General del Estado de la unidad de Homicidios Culposos quedaron a cargo del peritaje y de la respectiva investigación.