Cada voto de la consulta de revocación costó $102
El alto abstencionismo que se registró el pasado domingo en el ejercicio de revocación de mandato elevó el costo de cada voto casi 500%.
Con una Lista Nominal de 92 millones 823 mil 216 mexicanos, el voto por cada persona debería haber costado 18.23 pesos. Sin embargo, únicamente participaron 16 millones 502 mil 636 ciudadanos, por lo que se elevó a 102.55 pesos.
El Instituto Nacional Electoral (INE) alcanzó a destinar mil 692.5 millones de pesos para la consulta del 10 de abril. El monto salió de los ahorros que la autoridad hizo, toda vez que le fue rechazado el otorgamiento de recursos para la revocación de mandato.
Con el presupuesto obtenido, se instalaron 57 mil 448 casillas en todo el país.
Se mandaron imprimir 94 millones 590 mil 469 boletas (siempre se imprime un poco más de la Lista Nominal), de las cuales solamente se ocuparon 16 millones 502 mil 636, dejando inutilizables 78 millones 87 mil 833.
Si bien no es comparable un ejercicio de participación ciudadana con otro, al menos en lo que fue la consulta popular de agosto de 2021, mediante la cual se buscó determinar si los últimos cinco expresidentes de México debían ser llevados a juicio, se destinaron 548 millones de pesos para la instalación de 57 mil 77 casillas.
En aquella ocasión se tuvo una Lista Nominal de 93 millones 671 mil 697 personas, de las cuales solamente salieron a votar 6 millones 663 mil 208. Se calcula que cada voto costó 79 pesos.
La diferencia con la consulta popular, es que se tuvo como antecedente el proceso electoral del 6 de junio de 2021; se utilizaron las ubicaciones de casilla y se convocó a los mismos funcionarios que ya estaban capacitados. Además, se reutilizaron impresiones de listas nominales y otros materiales, así como insumos sanitarios de la elección anterior; no se colocaron consejos estatales ni distritales.
En contraste, en el ejercicio del pasado domingo, se tuvo que imprimir todo el material electoral, adquirir insumos sanitarios, instalar consejos locales y distritales, así como realizar la capacitación de funcionarios de casilla.
De acuerdo con información del INE, cada casilla tuvo una inversión de 29 mil 400 pesos. Implica todo el material que se requiere para que quede integrada, más la papelería, además del apoyo a funcionarios de casilla y los insumos sanitarios.
La impresión de cada una de las boletas tuvo un costo de 0.38 pesos, tomando en cuenta que no fueron elaboradas en papel de alta seguridad. Para ello se erogaron 35 millones 944 mil 378 pesos. Sin embargo, solamente se utilizaron 16 millones 502 mil 636 de esas boletas.
Durante siete meses, el Instituto Nacional Electoral preparó el ejercicio de revocación de mandato del domingo.
Por ley, para que la consulta resulte vinculante, era necesario que 40% de las personas registradas en la Lista Nominal salieran a votar, sin importar la opción que escogieran.
Los datos oficiales, proporcionados por la autoridad administrativa electoral, revelan que salieron a votar 16 millones 502 mil 636 personas, de las cuales 15 millones 159 mil 323 (91.86%) eligieron la opción de que el Presidente de la República continúe en su cargo; un millón 63 mil 209 (6.44%) votaron porque se vaya, y 280 mil 104 (1.64%) anularon la boleta.
Ahora será el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) el que calificará el ejercicio de revocación y determinará si resulta o no vinculante.
Durante todo el desarrollo del proceso se vivió una constante confrontación entre la autoridad electoral y el Poder Legislativo y el gobierno federal.
Y es que el INE solicitó a la Cámara de Diputados 3 mil 830.4 millones de pesos, recurso que le fue negado. Ante ello, el instituto pidió a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público una ampliación presupuestal de mil 700 millones de pesos, pero también le fue rechazada.
El INE, entonces, comenzó a revisar su presupuesto para generar ahorros y tener recursos para el ejercicio de la revocación de mandato, con lo cual obtuvo los mil 692 millones de pesos.
Al concluir el proceso revocatorio, el instituto electoral calificó la jornada como algo exitoso, a pesar —se expuso— del boicot que se hizo a partir de negarle los recursos económicos para poder instalar, al menos, la totalidad de casillas que se requerían, de acuerdo con la ley.
A pesar de ello, el Instituto Nacional Electoral defendió que con esas 57 mil 448 casillas instaladas en el país, toda la ciudadanía pudo votar.