Después de nueve años, Édgar Elías Azar se va del TSJ
Nueve años después de estar al frente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), así como del Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México, el magistrado Édgar Elías Azar presentará su renuncia este martes por motivos que han no ha explicado, por lo que el órgano jurisdiccional iniciará ese mismo día el proceso para elegir a quien lo sustituya, ya que el tribunal no puede quedar acéfalo.
Hasta el momento, no se sabe cuál será el destino del magistrado; sin embargo, fuentes al interior del organismo dieron a conocer que posiblemente opte por una embajada en los Países Bajos, todo dependerá de una reunión privada que sostendrá este lunes con funcionarios federales.
Según el órgano interno del TSJ, el sucesor de Elías Azar sólo permanecerá 21 meses al frente del Poder Judicial capitalino, pues se buscará que concluya la administración pendiente, en este sentido se dio a conocer que la renuncia será presentada el martes ante magistrados en privado.
Después, en un primer pleno público, los interesados en la presidencia del organismo, lo harán saber a sus pares. En un segundo pleno, llevarán a cabo la exposición de su plan de trabajo y proyecto para obtener los votos que les permita ocupar la presidencia del Tribunal Superior de Justicia hasta diciembre de 2018.
En 2008 fue elegido por primera vez para llevar las riendas del tribunal, en 2012 fue reelecto por primera vez, donde también obtuvo la mayoría de votos, de igual manera ganó la reelección del año pasado para seguir al frente del organismo, trabajo que desempeñará hasta fin de mes.
El también presidente de la Comisión Nacional de Tribunales Superiores de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos encabezó y coordinó los trabajos para la implementación del nuevo Sistema Procesal Penal Acusatorio en enero de 2016, y aseguró que no se iría hasta que estuviera implementado en la capital.
Por nueve años ha liderado el poder judicial local y durante su periodo se han registrado diversas polémicas, una de ellas, apenas hace unos meses con la elección de magistrados, donde se conoció que algunos cuentan con antecedentes de inhabilitación, querellas penales, salarios excesivos y nexos políticos.
Otro de los casos fue en 2009, cuando empleados mutilaron siete expedientes de necropsias entre ellos los de Fernando Martí y Yolanda Cevallos Coppel, ambos secuestrados y asesinados.