"Como lo quiero, me resulta difícil criticarlo", responde la escritora Elena Poniatowska (París, Francia, 1932) al ser cuestionada sobre el primer año de gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Sin embargo, Poniastowska, que está lanzando el primer tomo de su libro El amante polaco, reconoce que sí hay algunas cosas por criticarle al Presidente: "Critico que la sociedad está muy polarizada, que hay ya un abismo entre una clase social y otra. Decirle a la gente fifí también es problemático y me parece un error".
La también autora de Dos veces única y El tren pasa primero analiza la conferencia matutina que a diario realiza el Presidente y la define como un ejercicio "cansado tanto para él como para los periodistas; podrían ser dos veces a la semana, no se necesita tanto, porque, como dicen, ‘en boca cerrada no entran moscas’".
Sobre la Fundación que lleva su nombre y que fue inaugurada en junio de 2018 en la colonia Escandón y dirigida por su hijo, Felipe Haro, la escritora comenta que debido al recorte presupuestal se han enfrentado a diferentes problemáticas: "No nos han liberado recursos", indica y agrega que no le gustaría que cerrara ese espacio.
La íntima novela
Elena Poniatowska recibe a EL UNIVERSAL en su casa, ubicada al sur de la Ciudad de México. Ahí, sentada en su sala, junto a un cojín con la imagen del presidente Andrés Manuel López Obrador, habla sobre su más reciente libro, El amante polaco.
En esta publicación, la escritora usa dos tiempos narrativos, uno para abordar la historia de Stanislaw Auguste Poniatowski, último rey de Polonia y su antecesor (1732); mientras que en el segundo tiempo habla sobre diferentes experiencias en la Ciudad de México, en la década de 1950.
"El libro habla de Poniatowski, hablar de él es remitirnos 200 años, porque él nació en 1732 y yo nací en 1932. Quise ver qué clase de persona era él y empecé a buscar libros, pero no había uno solo".
La información que encontró sobre Poniatowski estaba en otros idiomas, pero después de un tiempo se dio cuenta que había recopilado muchos documentos hasta que la investigadora Marta Lamas le recomendó dividir su libro en dos tomos. Sin embargo, en esta primera parte sí hay fragmentos en los que ella reflexiona sobre el México de antes y recupera algunas de sus vivencias.
"(De 1950 a la fecha) Ha cambiado todo, por ejemplo, la vestimenta, en específico con los blue jeans ahora todos los usamos, es decir, son democratizadores, aunque siguen habiendo desigualdades sociales. En Nueva York ves pordioseros en la calle, pero la diferencia es que allá son autores de su propio destino. Aquí, cuando llegué a México, vi cantidad de hombres y mujeres descalzas, pero ya no los hay, eso ha sido por la evolución del país, no creo que por los buenos gobiernos".
Además de reflexiones sobre el país también cuenta momentos como su anhelo por querer estudiar en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, o sus experiencias junto a Carlos Fuentes, Salvador Novo, Elena Garro, Rosario Castellanos, Octavio Paz o Carlos Monsiváis.
"A todos ellos los conocí muy jóvenes y debí de hacer un diario para escribir lo que vivía con ellos, pero absurdamente, como hacía tanto periodismo, no lo hice. Fue una pérdida no haberlo hecho".
En el libro publicado por Seix Barral, Elena Poniatowska aborda temas como su forma de ejercer el periodismo, los cambios en la sociedad y el papel de la mujer. En el caso del periodismo, dice, se centró en hacer retratos de personajes culturales de la época, pues "tuve la suerte de conocerlos", además recuerda que en 1953 no había mujeres periodistas.
"Las mujeres de ahora son de lo más libres, en aquella época la virginidad era un valor enorme, había interés por casarse de blanco, pero ahora son cosas que a la gente le importan un pito". Se reconoce como una mujer "privilegiada", pero también habla sobre su edad: "Ahora soy vieja y siento miedo por lo que fui, porque en esa época me atrevía a mucho".
En el segundo tomo, adelanta, El amante polaco hablará sobre las batallas que perdió Poniatowski.