INE rechaza ampliación de mandato de Jaime Bonilla
Ni México, ni Baja California, merecen este agravio
Por vulnerar el principio de certeza, el Consejo General del Instituto Nacional Electoral rechazó la ampliación de mandato del gobernador electo de Baja California, Jaime Bonilla Valdez; aprobada por la XXII Legislatura local una vez concluido el proceso electoral.
El consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, señaló que lo que sucede en Baja California, es que se pretenden “modificar las reglas del juego, después de que el juego terminó”.
Añadió que la Suprema Corte de Justicia de la Nación o eventualmente la Sala Superior, que son los dos órganos con potestad para juzgar la constitucionalidad de las leyes violatorias, podrán reestablecer un orden hoy vulnerado.
Por su parte, el consejero Ciro Murayama, expresó:
“México no se merece los atropellos que se están fraguando hoy en Baja California y los bajacalifornianos tampoco”, respecto a la consulta ciudadana convocada por el congreso de la entidad para resolver el problema es un procedimiento inventado.
“Lo que hay en la Constitución de Baja California es la consulta popular, el plebiscito y el referéndum, no la consulta ciudadana. Pero además la consulta popular en la Constitución de Baja California expresamente dice: no puede hacerse en materia electoral. Y esto es materia electoral a todas luces”.
Murayama añadió que el Congreso llega a tal nivel de descuido jurídico que integra una Comisión Legislativa para que organice una consulta que no tiene base constitucional, la cual, se advierte, será financiada mediante las aportaciones voluntarias de los diversos representantes populares, militantes de distintos partidos políticos, grupos de la sociedad civil y todo aquel que desee participar en este procedimiento. “O sea, con coperachas se resuelven los asuntos constitucionales. Qué descuido, qué desfachatez, qué agravio al Estado de derecho”, afirmó.
Por último, el consejero Marco Antonio Baños refirió que cuando Jaime Bonilla se registró como candidato, ya sabía que concursaba por la vía electoral por un mandato de menos de dos años y el plazo que dura un encargo es una de las reglas básicas previas a cada proceso electoral.
“Lo que está ocurriendo ahí es que el propio Bonilla está traicionando a los electores de Baja California, pero concretamente a los que lo eligieron a él, ¿por qué?, porque le dieron un mandato por dos años”.
Baños abundó que este es un precedente muy grave porque pueden existir tentaciones en cualquier sentido, “un día el Congreso Local de un estado no le gusta que el Gobernador esté por seis años y le quitan cuatro, o le quieren quitar tres; pues si pueden ampliarlo también podrían reducirlo, pues claro, porque los congresos podrían colocarse en el escenario de que están por encima de los votantes”.