Festeja alcaldesa al estilo fifí y con bendición católica
Lo que pudo ser el brillante y austero inicio de una nueva “era” en Mexicali, Baja California, nos platican, se convirtió en un escenario opacado por los excesos y el no respeto al Estado laico.
Resulta, nos explican, que la toma de protesta como alcaldesa de la morenista Marina del Pilar Ávila llamó la atención, al ser un evento de más de tres horas, en el que hasta el obispo de esa ciudad cobró notoriedad. Para arrancar su administración, nos detallan, doña Marina preparó drones, pantallas gigantes, la proyección de videos sobre ella y áreas fifís para invitados exclusivos, sin acceso para el pueblo.
Pero eso no fue todo, nos dicen, pues el acto —que se realizó en la explanada de la catedral de Mexicali— también incluyó la bendición del obispo José Isidro Guerrero, factores que en su conjunto molestaron, al grado de que muchos abandonaron a la morenista antes de finalizar el convite. Así, nos dicen, los reclamos tras la primera noche de una entidad que, por primera vez, es gobernada en sus cinco municipios por la 4T.