La abrupta renuncia del auditor superior del estado, Carlos Montejo Oceguera, se destapan y confirman las pésimas prácticas que se llevaron a cabo dentro del Gobierno a cargo de Francisco Vega de Lamadrid
. En la relatoría de quien fungía como auditor del estado, se mencionan llamadas hechas por el exgobernador para ejercer cierto tipo de presión sobre el trabajo que realizaba Montejo. Además, sale a relucir el nombre de Eva Rodríguez como entonces presidenta de la comisión de fiscalización del Congreso del Estado. La que debe de velar por los dineros, pues.
Esto, en temas de corrupción; fue anunciado desde el 8 de julio por miembros honoríficos del sistema estatal anticorrupción, alertando de un enroque político que beneficiaba al entonces Gobernador, Francisco Vega… iban a seleccionar pues, a Carlos Montejo Oceguera para que fuera el Auditor Carnal… la comisión especial se estaba desmarcando del engaño que el ejecutivo planeaba y ejecutaba el gobierno del estado. Esto violaba el articulo 95 de la ley que regula la elección del magistrado, del fiscal y los titulares de los órganos de control de los organismos descentralizados tienen que pasar por una comisión especial. Esta que se había formado y le daba poder a 4 ciudadanos y 3 diputados para lanzar la convocatoria. Y para el proceso donde eligieron a Montejo, que creen… quedó fuera la comisión especial.
Y así fue el proceso caprichoso del gobierno panista. Utilizado a sus huestes como Raúl Castañeda Pomposo para hacer y deshacer a su antojo la constitución del estado. Este diputado sin duda debería estar bajo la lupa anticorrupción. La historia está dicha y ponen a Montejo como auditor.
Jaime Bonilla como candidato y en reunión con priístas en el rancho del “oso Monge”, relató como el mismo recibió una llamada de Francisco Vega pidiéndole que le aprobaran las cuentas publicas y él se retiraba el último año… a lo que según Bonilla se negó y hasta amenazó con quitarle los bienes inmuebles que pudieran haber adquirido de manera desleal con recursos públicos del Estado. Este mismo modus operandi de Kiko Vega, le fue aplicado a Montejo y termino por tronar lo que a todas luces estaba viciado de origen. Recuerden, lo que mal empiez, mal acaba.
Ahora, se busca auditar por más de mil 200 millones de pesos al gobierno de “Kiko” Vega, le van a escudriñar dicen todo lo que tenga que ver con sus cuentas públicas. Deberían hacer lo mismo con los diputados de la 22 legislatura. Ahí hay que voltear las miras en aras de transparencia y mecanismos anticorrupción.
Mientras tanto, no hay un sistema estatal anticorrupción que tenga garras y dientes, que pueda hacer su trabajo y dar resultados históricos en el país. Depende en estos momentos de la voluntad del actual Gobernador del Estado, Jaime Bonilla, el que se castigue de manera ejemplar a todos aquellos servidores públicos desleales que hayan hecho mal uso de los recursos públicos del Estado. Pero nada de esto sirve si Bonilla y “Kiko” Vega, resultan ser socios en los proyectos de las desalinizadoras.
Tendrá que pasar algo verdaderamente extraordinario para que un gobierno cambie la historia del Estado. El beneficio de la duda se les dio al igual que el voto. Sólo falta esperar a que una vez más el tiempo sea quien ponga a cada quien en su lugar. Porque como lo mencionó enfáticamente Francisco Fiorentini: Donde está la COPARMEX, CANACINTRA, CLUB DE LEONES, LOS MAESTROS, PADRES de FAMILIA, COLEGIO DE ABOGADOS… lo único que se confirma con todo esto, es que el miedo de la clase política a los ciudadanos sigue vigente.