Epidemiólogos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhortan a la población del uso correcto de cubrebocas, el cual debe cubrir nariz y boca para evitar contagios por enfermedades respiratorias.
Los diferentes tipos de cubrebocas evitan que las personas en nuestro entorno se puedan contagiar, además de protegernos a nosotros mismos. Los hay estándar, bifásico de uso quirúrgico o de cirujano, y trifásico como las mascarillas de alta eficacia.Si sólo se cubre la boca, los microorganismos que se quedan en la parte externa del cubrebocas se van a respirar por la nariz y eso provoca que la persona se enferme.
Un cubrebocas estándar es de uso común y protege un 70 por ciento que la persona enferma no transmita la enfermedad ni permita la salida de secreciones. Además tiene un periodo de vida de cuatro horas aproximadamente. Mientras que el cubrebocas trifásico es el que tiene pliegues y un alambre que se amolda a la forma de la nariz y al rostro, y por consiguiente brinda mayor seguridad.
Y las mascarillas N95 o KN95, tienen hasta un 98 por ciento de seguridad donde ninguna partícula menor a cinco micras de espesor va a tener contacto con las vías aéreas.
Actualmente la mayoría de mexicanos no están acostumbrados a usarlos, el primer reflejo es tocarse la cara y tratar de acomodarlo todo el tiempo, pero al hacerlo lo están contaminando.