Un hecho fatal se produjo el pasado viernes 14 de mayo en Buenos Aires, Argentina. Dos niños, de 7 y 11 años de edad, fueron atropellados por un tren mientras intentaban rescatar a un perrito que se había atascado en las vías.
El hecho, que ocurrió entre las estaciones de Sol y Verde y Derqui en la localidad José C Paz, resultó con la muerte de los infantes y del perro al que querían salvar.
Algunos habitantes de la zona le comentaron a medios argentinos que los niños, de los que no se han revelado los nombres, se encontraban jugando con el can cerca a las vías férreas. En un momento, el perrito se alejó y quedó atorado en el paso del tren, por lo que los pequeños decidieron ayudarlo a soltarse.
Sin embargo, no lograron hacerlo con la suficiente rapidez y el tren, que se desplazaba a gran velocidad, tampoco alcanzó a frenar antes de impactarlos, ocasionándoles la muerte instantánea a los tres involucrados.
Por el momento no se han revelado la relación que tenían las dos víctimas ni los pronunciamientos de sus familiares.
Por su parte, el servicio de la línea San Martín tuvo que ser detenido por horas para la realización de los trabajos forenses, por lo que atravesó por demoras y cancelaciones durante la noche del viernes. Una vez se hicieron los levantamientos correspondientes, este pudo ser restablecido con éxito.
El accidente se produjo en medio de las reparaciones y reformas que se están llevando a cabo en varios tramos de las vías.
Accidentes con trenes, un caso reiterativo
Este trágico hecho no ha sido el único que ha involucrado trenes en Argentina. De acuerdo a ‘Crónica’, un diario del país latinoamericano, una familia que se desplazaba en su vehículo fue arrollada por un ferrocarril en Sarmiento en la localidad de Merlo.
No obstante, en esa ocasión el golpe no fue mortal y ninguno de los integrantes del vehículo salió herido de gravedad.
Otro hecho tuvo lugar el 11 de abril, en las mismas vías de José C Paz, cuando un autobús casi es embestido al haber quedado atrapado entre las dos barreras del tren. Sin embargo, en este caso el conductor pudo acomodar el vehículo paralelamente para que este quedara ubicado a un lado del ferrocarril. Con dicha maniobra, todos los pasajeros y el chofer pudieron salvarse del impacto.