La Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Baja California (CEDHBC), documenta casos de trabajo infantil en la entidad e investiga la actuación de diversas autoridades en el tema, reiterando su llamado a que todas las intervenciones del Estado se realicen con perspectiva de derechos humanos.
No es un caso que sorprenda, pues CADENA NOTICIAS ha detectado de nueva cuenta, niños trabajando o acompañando a sus padres durante la tarde y noche en actividades de comercio en los cruceros, pero particularmente en los reciente días en la Garita de San Ysidro, situación que ya es observada por la Comisión Estatal de Derechos Humanos.
El ombudsperson, Miguel Mora, informó que, en diciembre de 2020 y por acuerdo del Consejo Consultivo de la CEDHBC, el Organismo abrió el expediente 1082/20 a partir del registro de casos de niñas, niños y adolescentes laborando en cruceros de municipios de Baja California, así como en los cruces fronterizos.
En ese sentido, el presidente de la CEDHBC llamó a las autoridades estatales y municipales a dar seguimiento a las condiciones del trabajo infantil actuando desde una perspectiva multidisciplinaria, integral y con énfasis en los derechos humanos.
“El acercamiento hacia la situación de niñas, niños y adolescentes que laboran debe ser holístico, compuesto por una estrategia que involucre a profesionales de la psicología y del trabajo social”, subrayó.
De igual manera, el presidente de la CEDHBC señaló que este grupo poblacional resulta prioritario, entre otros elementos, debido al principio del interés superior de la niñez, comprendido en la Convención sobre los Derechos del Niño, documento firmado y ratificado por México, el cual establece que los Estados partes deben asegurar que todas las niñas y niños —sin ningún tipo de discriminación— se beneficien de medidas especiales de protección y asistencia; tengan acceso a servicios como la salud, educación, que puedan desarrollar plenamente sus personalidades y habilidades, que crezcan en un ambiente de amor y comprensión, entre otros derechos.
Miguel Mora destacó que las personas que trabajan con niñas, niños y adolescentes deben tener a su alcance los instrumentos de protección de los derechos de ese grupo de la población, para conocer las obligaciones que tienen las autoridades de respetar y garantizar el respeto a su dignidad humana.
El ombudsperson solicitó tanto a las autoridades como a la sociedad civil considerar la importancia de identificar y abordar las condiciones económicas que propician estos fenómenos, no solamente por medio de una asistencia social o humanitaria, sino atendiendo los factores estructurales, y señaló que en la medida en que no se provean condiciones laborales, económicas y educativas a esta población, la situación permanecerá.
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