El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, dimitió el martes tras una investigación que determinó que había acosado sexualmente a 11 mujeres, ante una creciente presión legal y las exigencias de su salida por parte del presidente Joe Biden y otros políticos.
La dimisión constituye una estrepitosa caída para un hombre del que se llegó a hablar como posible aspirante a la presidencia de Estados Unidos.
Cuomo, un demócrata que desde 2011 ocupaba el cargo de gobernador del cuarto estado más poblado de Estados Unidos, hizo el anuncio después de que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, publicara el 3 de agosto los resultados de una investigación independiente de cinco meses que concluía que había incurrido en conductas que violaban las leyes estadounidenses y estatales.
La investigación, que se detalla en un informe de 168 páginas, concluyó que Cuomo toqueteó, besó o hizo comentarios insinuantes a mujeres, incluidas trabajadoras actuales y anteriores del Gobierno -una de ellas policía estatal-, y tomó represalias contra al menos una mujer que le acusó de conducta sexual inapropiada. Cuomo negó haber cometido ningún delito.
La vicegobernadora Kathy Hochul, demócrata del oeste de Nueva York, asumirá el cargo de gobernadora del estado de más de 19 millones de habitantes hasta el final del mandato de Cuomo en diciembre de 2022, tal y como establece la constitución del estado, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar el puesto.
La dimisión de Cuomo supone la segunda vez en 13 años que un gobernador de Nueva York dimite por un escándalo, después de que Eliot Spitzer renunciara en 2008 por el uso de servicios de prostitución. Cuomo también se suma así a la lista de hombres poderosos que han dimitido en los últimos años tras el auge del movimiento social #MeToo contra el acoso y los abusos sexuales, que ha sacudido el mundo de la política, de Hollywood, las empresas y el ámbito laboral.
Su dimisión libró a Cuomo de una posible salida mediante un proceso de destitución en la asamblea legislativa estatal.
Cuomo, de 63 años, fue elegido para tres mandatos como gobernador, al igual que su difunto padre, Mario Cuomo. Anteriormente fue secretario del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de Estados Unidos entre 1997 y 2001, bajo el mandato del expresidente Bill Clinton.
Al igual que su padre, Andrew Cuomo nunca se presentó como candidato a la presidencia, a pesar de las especulaciones sobre sus posibles ambiciones nacionales. El año pasado adquirió protagonismo nacional a principios de la pandemia de COVID-19 tras ofrecer conferencias de prensa diarias mientras su estado se convertía en el epicentro estadounidense de la crisis sanitaria.
La investigación civil determinó que las acciones de Cuomo y sus asesores principales violaron múltiples leyes estatales y federales, pero James no presentó acusaciones penales. Los fiscales locales son libres de hacerlo, lo que significa que Cuomo aún podría enfrentarse a riesgos legales.
Los fiscales locales de Manhattan, el condado de Nassau, el condado de Albany y el condado de Westchester dijeron tras la publicación del informe que están investigando el asunto y que han solicitado pruebas a la investigación independiente. El alcalde de Nueva York dijo que Cuomo debería enfrentarse a cargos penales.
Cuomo había negado durante meses las crecientes acusaciones de acoso sexual, y reiteró esta actitud tras la publicación del informe de investigación. Sin embargo, lo que quedaba de su apoyo político se desmoronó después de que se hicieran públicas las conclusiones. Horas después, Biden, amigo del gobernador desde hace años, dijo a los periodistas en la Casa Blanca: "Creo que debería dimitir".
Otros demócratas destacados, entre ellos los dos senadores del estado, Chuck Schumer y Kirsten Gillibrand, y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, también se sumaron a las peticiones de dimisión de la otrora estrella del partido.
Los investigadores concluyeron que Cuomo y sus ayudantes crearon un lugar de trabajo "tóxico" y "hostil" en una oficina atenazada por el acoso, el miedo y la intimidación. Las denuncias de acoso sexual surgieron después de una crítica por parte de políticos demócratas de Nueva York de que Cuomo gobernaba mediante la intimidación.