Mitos de las pastillas anticonceptivas
Las pastillas anticonceptivas NO son peligrosas. En ese caso, realmente son lo que necesitas para estar segura y saludable. Si estás sexualmente activa no solamente tienes que conocerlas, sino que también podrían ser tu mejor opción para evitar embarazos no deseados… y no lo haces porque crees que te hacen daño, cuando realmente no es verdad.
Te hacen subir de peso: Algunas mujeres ganarán peso de agua por tomar este tipo de pastillas. Sin embargo, no ganarán más peso que eso. Existen mujeres que, tal vez por coincidencia, suben de peso con la pastilla, pero esto sucede usualmente porque siguen desarrollándose en su adolescencia o no toman los cuidados debidos para mantener un peso saludable.
Al dejarla, será difícil quedar embarazada: En cuanto dejes de tomar la pastilla, podrías quedar embarazada. Este método anticonceptivo no afecta tu fertilidad. Si dejas de tomar tus píldoras a los 40 y te cuesta mucho trabajo tener un bebé, es por culpa de la edad, no por otra cosa.
Tienes que tomarlas al mismo tiempo todos los días para que funcione: Está bien que se te haya olvidado tomarte tu pastilla un par de horas, incluso un día completo, pero obviamente no funcionará si te la saltas una semana entera.
Causa acné: De hecho las pastillas pueden ayudarte a eliminar el acné. Te ayudarán a disminuir los niveles de testosterona en tu sistema y, por ende, reducir las probabilidades de desarrollar acné.
Tu cuerpo necesita un descanso de tanta pastilla: La única razón que tienes para tomarte unas vacaciones de tus métodos anticonceptivos es si estás buscando quedar embarazada, ¡no hay otra!
No son necesarias durante la lactancia: Este es un mito muy común y completamente falso, además de que podría ser el culpable de muchos embarazos no deseados. La lactancia exclusivamente puede suprimir hormonas que no permiten la ovulación, así que habrá menores posibilidades de embarazarse, pero aun así no es suficiente como para no utilizar un método anticonceptivo.