¡Cuidado! Estos son los síntomas del virus Coxsackie
El virus Coxsackie es un padecimiento que no causa la muerte, y su desarrollo es más común durante la temporada de calor y lluvias, así lo señaló Arturó Mompín Ramírez, subdirector de vigilancia Epidemiológica de la Secretaría de Salud.
El virus Coxsackie pertenece a la familia de los enterovirus (que incluye también los virus de la poliomielitis y el virus de la hepatitis A), los cuales viven en el tracto digestivo de los seres humanos.
Los virus Coxsackie son muy contagiosos. Suelen propagarse de una persona a otra a través del contacto con manos sucias y superficies contaminadas con heces. También se pueden contagiar mediante las gotitas de líquido que se expulsan al estornudar o toser.
Signos y síntomas
El virus Coxsackie puede producir una amplia variedad de síntomas. Alrededor de la mitad de los niños infectados por el este virus no muestran síntomas. Algunos niños tienen fiebre alta repentina, dolor de cabeza y dolores musculares. Otros presentan también dolor de garganta, malestar abdominal o náuseas.
Un niño infectado por el virus Coxsackie puede tener fiebre sin presentar ningún otro síntoma. En la mayoría de los casos, la fiebre dura unos 3 días y luego remite.
Aparte de la fiebre, el virus Coxsackie puede provocar distintos síntomas que afectan a diferentes partes del cuerpo:
Enfermedad mano-pie-boca: un síndrome causado por el virus Coxsackie que cursa con ampollas rojas y dolorosas en la garganta, la lengua, las encías, el paladar duro y la cara interna de las mejillas, así como en las palmas de las manos y las plantas de los pies.
Prevención
No hay ninguna vacuna para prevenir la infección por el virus Coxsackie. Lavarse las manos es la mejor manera de protegerse.
Los juguetes que se comparten en las guarderías deben limpiarse de manera regular con un desinfectante porque el virus puede vivir en estos objetos durante varios días.
Los niños que contraen una infección por el virus Coxsackie deben faltar a la escuela o a la guardería durante varios días para evitar el contagio.
La duración de la infección por el virus Coxsackie varía mucho. En los cuadros que sólo cursan con fiebre, la temperatura del niño puede volver a la normalidad al cabo de 24 horas, aunque la duración promedio de la fiebre es de 3 a 4 días. La enfermedad mano-pie-boca suele durar de 2 a 3 días y la meningitis viral puede durar de 3 a 7 días.