El cigarro se come tu belleza
Si fumas mucho, seguro ya sabes que necesitas dejarlo. Es malo para tu corazón, pulmones, cerebro, e incluso vida sexual. Pero ya en serio: no lo has dejado porque es súper difícil. Aun así, ¿te atreves a poner tu belleza en riesgo?
Ojeras
¿No odias esas horribles ojeras? Si fumas, tienes 4 veces más probabilidades de dormir mal. Es posible que la nicotina te provoque insomnio, y tus ojeras serán las primeras en decirle al mundo lo que está pasando.
Psoriasis
La psoriasis es una enfermedad autoinmume que a veces aparece sin la necesidad de haber tocado un cigarrillo. Sin embargo, si fumas, tu riesgo de tener esta condición aumenta, y muchísimo. De acuerdo a un estudio realizado en 2007, si te fumas una cajetilla por 10 años, tu riesgo de psoriasis sube un 20%.
Dientes amarillos
¿No te gustaría tener una sonrisa hermosa? Pues no la conseguirás si sigues fumando. Esto deberías saberlo: la nicotina mancha los dientes. En pocos años el cambio en tu dentadura será muy aparente.
Envejecimiento prematuro y arrugas
Las arrugas se ven de todo, menos estéticas, mucho menos en una persona joven que fuma. Los expertos sugieren que fumar acelera el envejecimiento. De hecho, las personas que fuman se ven 1.4 años más viejas que los demás.
Dedos amarillos
La nicotina del cigarro no sólo mancha de amarillo los dientes (y las paredes de tu hogar), sino que también mancha los dedos y uñas. Si buscas en Internet, puedes encontrar muchos remedios caseros, incluyendo jugo de limón, etc.
Cabello delgado
Si la piel arrugada no fuera suficiente, el cigarro también afecta tu cabello. Los expertos creen que los químicos tóxicos del cigarro dañan el ADN del folículo del cabello y genera radicales libres. ¿El resultado? Los fumadores tienen cabello más delgado que, con el paso del tiempo, perderá su color antes que las personas normales.