Mitos y realidades sobre la diabetes que debes conocer
La diabetes es uno de los padecimientos más comunes en México, a pesar de esto, la información entorno a esta enfermedad es confusa y está llena de mitos: que si la diabetes es curable, o se quita con jugos, que si da por un susto, o que hay de la buena y de la mala o que la insulina provoca ceguera o amputaciones, son algunos de los mitos que envuelven a la enfermedad crónico degenerativa.
Ante esta desinformación generalizada, el jefe de Endocrinología del Hospital General de México "Eduardo Liceaga", Valentín Sánchez Pedraza, comentó que la diabetes no se cura, se controla.
Los mitos más comunes son que existe diabetes de la buena y de la mala, como endocrinólogo, Sánchez Pedraza afirmó que ha conocido casos en los que la gente piensa que existen estos tipos de la afección, lo que es falso.
"Es una sola enfermedad, en muchas ocasiones el paciente asocia la sintomatología con algo bueno y por eso descuida su alimentación y tratamiento, pero los invito a que cada uno se apegue a su dieta, a realizar actividad física y seguir el tratamiento farmacológico para evitar complicaciones", expresó el experto.
"El tratamiento naturista, sí funciona", es otro mito que preocupa a los especialistas. "Al padecer diabetes mellitus los pacientes buscan lo que consideran alternativas de tratamiento para contrarrestar y los naturistas son uno de ellos".
El endocrinólogo comentó que la gente acude a sesiones de acupuntura o se realizan un implante de hipófisis de cerdo, ninguno de los anteriores tiene un sustento científico y en cambio, provocan graves complicaciones a la salud.
Aseguró a los pacientes que el tratamiento farmacológico que se ofrece en el Sector Salud ha sido probado y estudiado previamente, mostrando los beneficios en la reducción de glucosa, que da seguridad del control de la enfermedad en el paciente que se le administra.
Acerca del consumo de bebidas light, Valentín Sánchez indicó que es necesario que un enfermo con diabetes lleve un riguroso plan alimenticio, pero, en infinidad de casos la persona no está acostumbrada a consumir bebidas o alimentos sin azúcar.
"Las bebidas como los jugos de frutas no forman parte de las recomendaciones, porque las azúcares son el principal componente de los mismos. Los sustitutos de azúcar o edulcorantes son una opción para satisfacer esta necesidad en el paciente, dado que únicamente actúan a través de las papilas gustativas, pero no impactan en los niveles de glucosa, sin embargo, deben consumirse con moderación".
Entre lo más común que piensan los mexicanos es que la diabetes da por un susto, pero el experto mencionó que cuando un paciente que tuvo alguna alteración por estrés y presentó aumento a su nivel de glucosa, sed o hambre excesiva y al realizarse estudios se demuestra un impacto en el azúcar, éste ya era propenso a padecer diabetes.
Existen dos factores para esta enfermedad: genético y ambiental, éste último relacionado con obesidad y sobrepeso. Si se cuenta con ambos la persona tendrá mayores posibilidades de padecerla.
Acerca de que la insulina provoca ceguera y amputaciones Sánchez Pedraza afirmó que este es uno de los mitos que más causa conflicto entre los pacientes y por ello se niegan a someterse al tratamiento vía insulina.
La insulina, es una sustancia que produce el organismo desde el nacimiento, con la diabetes disminuye la cantidad, por lo cual se debe administrar para controlar los niveles de glucosa.
"Si la insulina fuese mala, todos estaríamos amputados o ciegos", sentenció. El especialista en endocrinología exhortó a todos los pacientes con diabetes para que lleven un plan de alimentación balanceado, realicen la actividad física recomendada por su médico y sigan al pie de la letra el tratamiento farmacológico.
"La diabetes no se cura, se controla. Esta enfermedad no es terminal como muchos piensan, simplemente se tendrán que realizar cambios en el estilo de vida". Reiteró que la medicina preventiva es primordial para prevenir este padecimiento, realizarse un chequeo anual y acudir al doctor ayudará a detectar a tiempo algún signo que pueda desencadenar esta enfermedad que en palabras del secretario José Narro, "ha cobrado más vidas que la Revolución Mexicana".