Tras muerte de su hijo, busca advertir sobre efecto colateral de COVID-19
Cuando los médicos dijeron a Lorena Navarrete que su hijo padecía de Síndrome Inflamatorio Multisistémico, ya era tarde para el joven de 16 años, quien falleció poco después.
Pese a trabajar en el sector de la salud, la habitante de la sureña ciudad de Puerto Montt desconocía el origen del dolor muscular y cansancio de su hijo, que arrojó reiteradamente negativo en las pesquisas por coronavirus.
Pero el síndrome, conocido como PIMS por sus siglas en inglés, suele aparecer entre dos y seis semanas después de la infección, incluso en cuadros asintomáticos de COVID-19.
"Tenían (los médicos) un diagnóstico y era PIMS. Fue el último día que yo lo vi", contó Navarrete.
"Trabajando en salud, no había escuchado el Síndrome Inflamatorio (...) no quiero que la muerte del Emilio sea en vano y que esto se sepa con el fin de que a otros papás no les pase lo mismo", agregó.
La infección produce alteración de la piel, del sistema nervioso central y falla cardíaca, pero no siempre es fatal si se trata de forma temprana.
La subsecretaria chilena de Salud Paula Daza dijo el lunes que de los 69.563 contagios de niños con COVID-19 durante la pandemia, solamente se han reportado 157 casos del síndrome.
"La tasa de casos de los niños que presentan estos cuadros es bastante baja, sin embargo, los profesionales de salud tienen que estar alertas", apuntó.
Chile suma más de 840.000 contagios y cerca de 22.000 fallecidos debido a la enfermedad.