Investigadores del Instituto de Astronomía de Hawái negaron que el acercamiento del asteroide 99942 Apophis, el próximo 6 de marzo, a la Tierra implique un riesgo para nuestro planeta. Del mismo modo, esclarecieron que la posibilidad de impacto en 2068, de la que tanto se ha hablado, es casi nula, pues equivale a un 99.99974% de probabilidad que no alcance a la superficie terrestre.
Los astrónomos actualizaron las mediciones en torno a la trayectoria del asteroide, ya que con el paso del tiempo, el efecto Yarkovsky, producido por el impulso de la luz solar modifica la aceleración, el cambio en la velocidad y dirección de un objeto a través del espacio. Este fenómeno sucede sólo en algunos casos y es crucial, ya que puede ayudar a evitar una colisión entre los astros.
El asteroide 99942 Apophis, también llamado como “El infame” y "Dios del caos", es conocido por sus acercamientos a la Tierra, motivo por el cual a lo largo del siglo del XXI ha sido el centro de atención y de estudio de un gran número de expertos en astronomía. Por su aproximación, registraron que se acercaría en 2029, 2036 y en 2068. Sin embargo, los expertos aseguraron que la visita de 2036 ha quedado descartada.
En cambio, durante los más recientes estudios, las posibilidades de impacto durante el sobrevuelo de Apophis en 2068 demostraron que son de uno en 380 mil con una probabilidad del 99.99974% de que el asteroide no alcance la Tierra. Estas observaciones, discutidas por primera vez en octubre de 2020 y actualizadas a principios de 2021, muestran un riesgo decreciente .
Para llegar a estas conclusiones, el astrónomo Dave Tholen y sus colaboradores utilizaron el telescopio Subarau en Maunakea, Hawai, a través del cual detectaron la aceleración del efecto Yarkovsky, impactando en Apophis. Los resultados, publicados en “Earth & Sky”, sugieren que el asteroide, que cuentan con un diámetro estimado de 340 a 370 metros, se está desplazando a más de 170 metros por año desde su posición orbital.
“Sabemos desde hace algún tiempo que no es posible un impacto con la Tierra durante la aproximación cercana de 2029”, aseguró Tholen, que estudia el movimiento del asteroide desde 2004.
“Las nuevas observaciones que obtuvimos con el telescopio Subaru a principios de este año fueron lo suficientemente buenas como para revelar la aceleración Yarkovsky de Apophis, y muestran que el asteroide se está alejando de una órbita puramente gravitacional en unos 170 metros (500 pies) por año, lo que es suficiente para mantener en juego el escenario de impacto de 2068”, explicó.
Sin embargo, el experto reconoció que existe una probabilidad de error pues estas observaciones no son fáciles de obtener y analizar, ya que factores como la distancia del asteroide en el momento de la observación, su composición, su forma y las características de su superficie alteran el resultado.
99942 Apophis forma parte de los asteroides que en los últimos años los astrónomos han rastreado y calificado como objetos celestes que se desplazan muy cerca de la Tierra. Entre ellos se encuentran el asteroide 2020 SW, que se acercó a nosotros el 24 de septiembre de 2020 a tan sólo 35 mil 900 kilómetros (km) de la superficie terrestre, equivalente al 7% de la distancia Tierra-Luna.
Por su parte, Lance Benner de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) comentó que Apophis tendrá un encuentro muy cercano con la Tierra el 13 de abril de 2029. En su punto más cercano se moverá a 37 mil 725 km de nuestro planeta, aproximadamente al 10% de la distancia Tierra-Luna: “¡Eso es muy cercano para una roca espacial de más de mil 115 pies (340 metros) de ancho!”, agregó.
De acuerdo con el integrante de la agencia espacial, pese a que este será el acercamiento más próximo a nuestro planeta registrado hasta nuestros días, su eje semi-mayor cambiará a tal grado que modificará a Apophis y como resultado, su velocidad orbital se ralentizará.
En este contexto, los astrónomos estudiarán si existe alguna posibilidad de impacto antes de la llegada del 2068, pues este será estudiado durante los sobrevuelos del 2021 y 2029, ya que estará visible no sólo para especialistas sino para toda la población por su estrecho acercamiento.