La "caída" del servicio de Facebook fue una de las más largas de su historia
La multinacional estadounidense Facebook indicó este jueves que la "caída" parcial de sus funciones registrada el miércoles y que también afectó a Instagram y WhatsApp (ambas de su propiedad) duró 22 horas, lo que la convierte en una de las más largas de la historia de la compañía.
En un comunicado dirigido a los desarrolladores, la firma que dirige Mark Zuckerberg explicó que el bloqueo empezó a las 16.00 GMT del miércoles (en la mañana de América y la tarde de Europa) y se prolongó durante casi un día entero, siguiendo activo por tanto durante parte del jueves.
La compañía también indicó haber resuelto ya todos los problemas tanto en Facebook como en Instagram, Messenger y WhatsApp, aunque algunos usuarios se quejaban en las redes sociales este jueves de que sus cuentas todavía no funcionaban con total normalidad.
Aunque no es raro que estas plataformas sufran "caídas" parciales o totales de sus funcionalidades, lo que sí es poco habitual es que se prolonguen durante tanto tiempo y, por ejemplo, la última registrada en Facebook e Instagram en noviembre pasado duró tan sólo 40 minutos.
Durante las horas de bloqueo, la compañía de Menlo Park (California, EE.UU.) recurrió a uno de sus mayores rivales, Twitter, para comunicarse con los usuarios a través de su cuenta oficial en la plataforma del pájaro azul.
"Estamos trabajando para resolver este asunto tan rápido como sea posible", indicó la empresa en un tweet, y la etiqueta #FacebookDown se convirtió en tendencia.
Por el momento, Facebook no ha identificado cuál es la causa de la "caída" de sus sistemas, pero sí ha descartado que se trate de un ataque informático DDoS, consistente en que piratas informáticos saturan con tráfico falso un destino web e impiden así el acceso a otros internautas.
La empresa de Zuckerberg se ha visto salpicada por multitud de escándalos relativos a la gestión de la privacidad de los datos de los usuarios durante los últimos meses, que han empañado considerablemente su imagen pública.
La mayor polémica a la que tuvo que hacer frente Facebook fue en marzo del año pasado, cuando se desveló que la consultora británica Cambridge Analytica utilizó una aplicación para recopilar millones de datos de internautas de la plataforma sin su consentimiento y con fines políticos.
La empresa se sirvió de datos de la red social para elaborar perfiles psicológicos de votantes, que supuestamente vendieron a la campaña del ahora presidente estadounidense, Donald Trump, durante las elecciones de 2016, entre otros.
Meses más tarde, en octubre, la compañía admitió que piratas informáticos robaron datos personales de 30 millones de cuentas.