Lanzan app para evitar daños neurológicos en bebés
A nivel mundial, la parálisis cerebral es la primera causa que afecta a niños con discapacidad física. Por ello, durante este mes, se lanzó en México la aplicación móvil Atención es prevención, para monitorear el desarrollo en los primeros meses de vida de los niños y, así, identificar de manera oportuna la presencia de cualquier daño neurológico.
Esta herramienta fue presentada por la Asociación Pro Personas con Parálisis Cerebral (APAC, I.A.P.) funciona como guía para que los padres detecten posibles síntomas, utilizando un lenguaje sencillo y diversos ejemplos para que pueda ser entendida con facilidad.
"Desde que el bebé nace, debe realizar ciertas actividades propias. Por eso, dividimos de los cero a los tres meses de edad, de los tres a los seis y así, de tres en tres, para que los papás conozcan el desarrollo por etapas", detalla Guadalupe Maldonado, directora de Procuración de Fondos y Enlace Institucional en APAC.
Como en cualquier tema de salud, la prevención y el diagnóstico a tiempo marca la diferencia. Muchos niños pueden presentar retraso pero, con estimulación temprana, éste disminuye.
"Ahora los papás son más cibernéticos. De ahí que se apostara por esta app, para que se sintieran más familiarizados. Al detectar signos de alarma, el paciente puede ser tratado de inmediato, con el objetivo de minimizar las secuelas. En México, por cada mil niños que nacen, de uno a tres tienen parálisis cerebral. Los pequeños que sufren este problema presentan epilepsia hasta en un 90% de los casos", precisa la doctora Eva Ibáñez, coordinadora de rehabilitación y servicios de salud de APAC.
De acuerdo con la experta, lo ideal es que los daños neuronales se diagnostiquen antes de los tres meses de vida.
Signos de alarma
Muchas mamás primerizas podrían confundir síntomas, no darles la importancia necesaria o exagerar con aquellos que son inofensivos. Atención es prevención busca orientarlas para que visiten a los especialistas ante cualquier sospecha.
"Existen cuatro puntos fundamentales a considerar. El primero, que puede darse a cualquier edad, es la constante irritabilidad: el niño comió, durmió, se refrescó, la mamá lo ha cargado un buen rato y no deja de llorar. Ese es un foco rojo: irritabilidad sin causa aparente. La segunda es una postura asimétrica: la cabeza solo está de un lado, se va hacia atrás, tiene las manos flexionadas o un pie se mueve más. En general, no hay coordinación", explica Eva Ibáñez.
Otros signos de alarma son que el nene está demasiado duro o aguado del cuerpo. Es normal que, al nacer, sean más duros, pero no pueden estar totalmente flexibles ni rígidos por completo. En APAC tenemos un protocolo en el cual se lleva a cabo una exploración clínica, vía sensorial, que incluye vista, tacto y audición. Además, todos los bebés hacen actividades de acuerdo con su edad. Observa si no lleva a cabo acciones que no correspondan a su etapa. Por ejemplo, si tiene nueve meses y aún no se sienta", concluye la doctora Ibáñez Medina.