¿Qué significado tiene la Rosca de Reyes?
Para cerrar el ciclo de todas esas reuniones familiares y laborales que caracterizan la temporada final del año están los cortes de rosca de Día de Reyes, pero ¿qué tanto conoces de su simbolismo? Desde la forma hasta la figura característica del niño están cargadas de mensajes, todas asociadas a la fe de la que se deriva, aunque algunas están tomadas de otras culturas, como se ha dado en distintas creencias.
Aunque tradicionalmente ha sido común en países de clima frío cristalizar la fruta en otoño para preservarla y contar con este tipo de alimento en invierno, antes de la popularización de los refrigeradores y conservadores, se le ha atribuido a las rebanadas de brillantes colores y reflejos azucarados que recubren la rosca el representar las joyas en las coronas de los reyes visitantes. Según una página del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera del Gobierno de México, el contenido de fruta cristalizada que adorna la rosca mayoritariamente se basa en el uso de naranja, limón, higo y cereza.
En cuanto a la forma del pan, simboliza el amor infinito de Dios a sus creyentes y viceversa. El círculo sin principio ni fin como símbolo también podemos encontrarlo en la corona de adviento, con misma forma y tamaño. Por sus dimensiones y composición la rosca, tiene una vida de anaquel limitada, por lo que está hecha para compartirse y comerse lo más pronto posible. Quien haya probado rosca de reyes el 9 de enero sabe que estas piezas no duran mucho en un estado comestible y se convierten rápidamente en una masa petrificada que no es nada agradable. La fecha en sí, 6 de enero, marca rigurosos 12 días desde la Natividad, por lo que el simbolismo de este número (presente lo mismo en los meses del año que en las horas del día o la noche, así como en los apóstoles y tribus de Israel), marca el ritmo de los tiempos.
El hecho de que la figura misma, de cerámica o plástico, esté oculta en la masa proviene de la huida que la Sagrada Familia se ve orillada a emprender, debido a la campaña genocida de Herodes, por lo que el niño está escondido en el pan.
El acto de cortar la rosca con cuchillo representa las víctimas del infame Rey, así como los efectos de las elecciones personales, pues la rebanada debe ser cortada y elegida por el comensal, quien en caso de encontrar la figura habrá sido su propia decisión la que convierte en el afortunado responsable de aportar los tamales en la fiesta de la Candelaria.