Gatito es injustamente condenado a muerte sólo por ser de Perú
En redes sociales, Selena Ali, una joven de 23 años, está pidiendo ayuda para poder mantener vivo a su gatito, luego de que las autoridades de Bélgica le solicitaran la presencia de su mascota para aplicarle la eutanasia por un temor infundado a que el animal, a pesar de no estar enfermo y contar con sus vacunas, pueda reintroducir la rabia a ese país, en donde se considera erradicada, únicamente porque fue adoptado en Perú.
Selena se encontraba en el país sudamericano un voluntariado en un albergue de niños en Cusco Perú y solía visitar un café en que también sirve como refugio de gatos, en donde conoció a Lee, su mascota, y decidió adoptarlo.
Con ayuda de la embajada de su país en Perú, consiguió todos los permisos requeridos para poder trasladar a Lee a su hogar en Bélgica una vez terminado su voluntariado, y no le fue difícil, pues el gato se encuentra en perfecto estado de salud y Selena se comprometió a completar su esquema de vacunación, incluída la de la rabia, cosa que cumplió al llegar a su hogar.
Sin embargo, ahora, las autoridades federales belgas, por medio de los Inspectores de la Agencia Federal para la Seguridad alimentaria (FASFC)están cuestionando la presencia del gato en país y notificaron a Selena que tendría que llevar al gato ante su presencia para que le aplicaran la eutanasia.
Su argumento es que antes de que ella dejara Perú, aun no estaban listos los permisos para que el gato entrara a Bélgica y, que además, el país del sur de América estaba considerado como "de alto riesgo para la rabia", sin embargo, el gato no tiene la enfermedad y está vacunado.
Por dicha injusticia, Selena inició una petición en internet para evitar que asesinen a su gato sin ninguna justificación bien argumentada, pues la principal razón que otorgan las autoridades es la protección contra la rabia, algo que ya está confirmado que el gato no posee, según los veterinarios a los que ha consultado.
De hecho, la FASFC envió ya agentes a la casa de Selena para recoger al gato y asesinarlo, pero por suerte ella no se encontraba ahí y decidió refugiarse en otro lugar con su mascota mientras su abogado, Anthony Godfroid apeló la decisión de la eutanasia ante el Consejo de Estado, pues Cusco ha estado libre de rabia desde hace 10 años, sin embargo, los jueces no dieron una respuesta positiva y ahora la embajada del país en Perú retiró su apoyo.
Sin embargo, el ministro de Bienestar Animal, Ben Weyts demostró su apoyo a Selena y Lee, recordando el artículo 1 de la legislación de Bienestar Animal, que establece que nadie debe asesinar a un animal sin necesidad, y aseguró que en este caso no hay necesidad.
Advirtió que si la joven había cometido alguna infracción al ingresarlo al país, se le tenía que sancionar a ella, no al gato. Aunque su caso está llamando la atención en todo el país, algunos están preocupados de que el veredicto no los beneficie en la próxima audiencia.